Rodando por el Bajo Aragón. El desierto de Calanda

• Punto de Inicio: Alcañiz. (Teruel)
• Punto de llegada: Torrevelilla (Teruel)
• Puntos de paso: Calanda- Desierto de Calanda
• Km de la ruta: 35,5
• Horario: 3 horas
• Desnivel de Ascenso: 788 mts
• Desnivel de Descenso: 462 mts

 

Camino de los Centros de BTT de la Comunidad Valenciana, surgió la idea de poder hacer una ruta a medio  camino hacia Peñiscola, y así fue como se planteó esta interesante ruta, la cual hice en solitario partiendo desde Alcañiz pasando por Calanda y concluyendo en Torrevelilla con un total de 35,5 kilómetros  y 788 mts de desnivel acumulado.

Muchas eran las ganas de rodar por estos lares, y por tanto perdí de vista  algunas consideraciones que debía de haber tenido en cuenta  como el tema de las alta temperaturas de esta semana pasada en la zona, que llegaron a sobrepasar  los 40º grados.

Partí pues de Alcañiz sin tiempo para ver el pueblo pues las 11,30 de la mañana no es buena hora para salir, pero el trayecto hasta estos lares se hacen largos, por lo cual sin encomendarme mucho más me puse en ruta desde Alcañiz, dejando la alta atalaya de los Calatravos de lado y yendo a buscar el camino que se dirige a Calanda partiendo desde el Molinillo de Alcañiz donde ya se coge el carril que va dirección Sur, por tramos planos de hormigón y tierra, que nos llevan a cruzar por ejemplo el Cordel Montañez las carreteras  Nª 232 hacia la Mangrana, para llegar a  la carretera  A-2045  (6,1 km) y rodar por ella un tramito hacia el Oeste para de nuevo rodar hacia el Sur, rumbo a la Torre Alonso (7,6 km) , donde se vira al Oeste.

 

Son zonas de rodar rápido aunque el calor me pega al suelo y el polvo me hace beber para quitar tanto polvo de la ruta, cruzo la carretera A-1408 a los 9, 2 km m y desde aquí el trazado va inclinado hacia el Oeste para poder ganar el pueblo de los tambores: Calanda.

Es como digo ruta plana, sin muchas referencias, ni marcajes, y donde prima sobretodo el seguimiento del track, aunque desde que se parte de Alcañiz  se haya toda una sierra que sirve de referencia, aunque mi miedo era que me tocase subirla, pero no en Calanda se vira al Este pasando la sierra por una vaguada más factible.

La llegada a Calanda (18,4 km)se va a deja notar por el olor a cerdo que despiden las diversas granjas existentes en sus inmediaciones. Aproveché para hacer una parada y visitar el cementerio de Calanda, con sus colección de cruces de hierro colado, y alguna que otra curiosidad que se pueden ver en el blog de Oriente Eterno.

Tras la parada y cruzar el pueblo de  Calanda, ahora muy en silencio, se vira al Este para rodar un buen trecho por la carretera A-226, para luego torcer por la carretera local A-2006 (20,9 km) rodando otro tramo por esta última y tras cruzar el río Guadalope    se abandona un poco más adelante (21,5 km ) virando a la derecha para entrar por un camino del Desierto de Calanda, que va ganando altura para ganar El Collado y Rincón Caliente que nos aporta vistas sobre el embalse de Calanda a la altura de Masada Niñorras para desde aquí  subir por el barranco La Zahoyera que va presentando los primeros repechos de la ruta y que nos pone paralelos a la Sierra la Ginebrosa.

Lo cierto que a estas alturas de la ruta todavía ruedo bastante bien, al menos hasta llegar a los restos de lo que fue el impresionante cenobio carmelita del Desierto de Calanda, con unos 29,5 km y con el termómetro rebasando los 40 grados.

A la altura del antiguo monasterio, el señor del mazo, me dió tal ostia, bajo un sol abrasador y sin apenas agua y con la barritas y demás que apenas si hacía su efecto, que me dejó cao, lo  cual me hizo temer en algún momento que si me sentaba podía perder el conocimiento, y lo peor es que no recordaba que para salir de este monasterio " escorial"  hacia Torrevelilla aún debía ganar los barrancos de  San Elías, el de Alcañiz, el de Servera. el de Lot Salir  y por el de Cascallar ganar la  Ermita de San Joaquin y el final de la etapa.

Antes de emprender la marcha me perdí por los vericuetos del cenobio, pero sin adentrarme mucho en él, pues estos lugares abandonados me da un poco de yu-yu, pero consciente de que su sombra me permitiría descansar y reponerme, al menos eso creí.

De nuevo hay que salir desde el Monasterio a la pista principal, y ganar el primer barranco de San Elías, desde el cual pensé que ha habría una bajada hacia el pueblo, pero no fue así, sino que repecho tras repecho , barranco tras barranco ganados  a pie y en encima la trotona, pegado a la cumbral de la Ginebrosa, puedo decir que no veía el momento de empezar a bajar, que por cierto es una bajada muy corta la que existe hacia Torrevelilla. No hay nada más que ver el perfil de la ruta.

Fue uno de los tramos más duros de mi vida ciclobiker, pues la el mercurio del termómetro se salía por arriba, y yo con apenas dos sorbos de agua,y sin recuperarme del mazado de la pájara.

Pero bueno al final salí bien librado del asunto de rodar por estos parajes turolenses, donde el calor es el principal enemigo, y está claro que estas épocas no son las ideales para rodar por estos lares, pues lo cierto es que no vi ni un alma por toda la ruta ni andando, ni a pie.

El careto tras la batalla.  

Nota; Esta ruta no pertenece a ningún trazado de  los Centros de BTT que se dan en la zona.

Track de la Ruta:

Víctor Guerra

VUIELTA A LA SIERRA DE CORTINA (TINEO)

· Punto de Partida y Llegada: Tineo

• · Puntos de paso: Piedrtecha - Cortina- Relamiego- El Peligro-Sebrán- Vega del Rey -Obona
• · Kilómetros de la ruta: 40,5
• · Horario de la ruta:5 horas
• · Desnivel de ascenso acumulado: 1.574 mts
• · Desnivel de descenso acumulado 1. 551 mts
• · Participantes: Jose Ramón Natal, Francisco Javier Paredes. Juan Moreno, Rubén Álvarez, Albano Capezzali, Fernando
• · IBP Index: 106

Tineo siempre es un lugar de referencia para nuestras rutas por la geografía astur, pero tal como nos recordaba la salerosa propietaria de la Parrilla Pensión Casa Vicente, Doña Loli, hacía ya tiempo que no nos dejábamos caer por Tineo y menos por El Peligro; por eso,  consciente de esa lejanía y tomando prestado parte del recorrido de las concentraciones de los amigos de BTT de Tineo, nos pusimos en esplendoroso día de otoño camino de Tineo, tierra natal de muchos liberales como Rafael del Riego, Campomanes, D. José  Maldonado... etc.

El proyecto de ruta es recorrer parte de la zona sureña del concejo partiendo de la villa capitalina de Tineo y sabiendo nuestro rango de longitudes estaba claro que no podíamos ir más allá de lo que marca la frontera del río Narcea, por tanto nuestro límite sur lo marcaría la picorota de El Caleyo en las cercanías de Relamiego, a la cual iríamos dando vuelta.

 

Salimos  por el tramo tal vez más bonito del Camino de Santiago, el tramo occidental que parte de Tineo, hacia el Alto de la Guardia, que antaño sea dicho  de paso era un camino se encontraba en pésimas condiciones, y ahora es un serpenteante camino que en esta ocasión nos guarece de la solana que ya aparece por lontananza pese a la niebla que cubre el valle a los mismos pies de Tineo.

La ruta plana en su desarrollo es una lujuria para nuestras piernas, pues nos divertimos en base a las fotos que vamos haciendo a la vez que parloteamos, más unos que otros durante el tramo; el camino jacobita está desierto de caminantes, por lo cual nos explayamos en toda su anchura, a la vez que vamos intentando ganar montados todos sus saltos y obstáculos que presenta el camino.

Ganada la cumbral del Alto de la Guardia con vistas sobre el valle de Tablao, abandonamos el Camino de Santiago para bordear la cumbral del Pico del Cuerno por su costado noroccidental, dejando el ramal a la derecha por el cual vendremos después de unas horas y unos cuantos kilómetros.

Desde este desvío hormigonado, dejamos el rumbo Oeste para ponernos dirección Sur, que mandará sobre nuestra trayectoria durante un buen rato.

Cruzamos la AS- 218 por Piedratecha y seguimos por amplias trazas de camino-pista hasta la iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe en Cortina, y continuar hasta otra capilla la de San Antonio, pasando un poco más adelante por delante de Casa Manolín, aunque a estas horas de la mañana el personal autóctono está todavía calentando la leche del desayuno.

Este será por un buen trozo de ruta lo más urbano que veamos, pues pronto nos emboscamos y nunca mejor dicho en las buenos caminos que surcan repoblaciones de pinos que alternan con manchas de bosque autóctono, en cuyos entornos nos encontramos en plena soledad, rota por nuestra presencia y una pareja cestita en la mano buscando setas, esperemos que sepan distinguirlas pues en nuestra bajada hacia el borde sureño al que nos dirigimos hemos vista una amplia presencia de bellas amanitas muscaria y las temibles faloides.

Seguimos bajando a la vez que vamos cerrando el bucle que nos da vista a un enclave nuevo para mí como es la explotación minera de Tres Hermanos , por encima asoman las chimeneas de la Central de Soto la Barca, y también la zona del fondo la reconocemos como los entornos de Merillés y el valle de Genestaza , un poco más al Oeste se ve el poblamiento de La Prohibida. Seguimos cerrando el bucle por el Sur, para virar al Oeste bordeando las laderas del Alto Las Cruces y el Monte La Armaya, cruzamos el carril que va a La Prohibida por la Veigas del Carbayu para seguir por las Campas y darle vuelta al Monte del Caleyu por encima de la riega de Xera.

Tras esta vuelta con un paisaje de montes y pinada, remontamos dirección Norte hasta llegar a Relamiego, que cruzamos hacia la Tejera y Los Parayones hasta desembocar en la AS-217 en El Peligro donde paso a saludar a Loli, de Casa Vicente que nos regala toda una ración de chorizo y jamón que los “esfamiaos” bikers que me acompañan se zampan en unos minutos.

Tras la visita dejamos a Loli con sus cacerolas y nos vamos hacia Sebrán, para abrirnos un poco al Oeste , y coger menos altura en dirección a El Roblu de Obona. Ahora estamos más altos y el paisaje tinetense se deja abarcar de buena gana con sus oblongas praderías. Se ven muchos buenos prados pero poco ganado.

Al poco de ciclar tomando altura descendemos por la espesura del bosque autóctono, tras cruzar la carretera TI-3 para darnos de bruces con un jacobita clon de Papa Noël con el que Juan se entretiene hablando un rato, parece ser que es holandés, entramos pues a Obona por el Camino de los Frailes y desembocar ente el amplio monasterio de Obona, cuyas ruinas recorremos a cada metro sin entender ¿ Cómo no es posible que haya un albergue de peregrinos en sus predios?

Seguimos subiendo hacia la carretera de AS-218, que cruzamos a la vez que perdemos una unidad biker, pues Juan Moreno opta por seguir la estela asfaltada camino de la villa natal de Campomanes.

Nosotros seguimos en ascenso por encima del eje asfaltado para de este modo dejar el rumbo Norte e ir virando al Este , pasando por las riegas de Chamabona, Campizu, Pascones, La Canar y Toural para ya en esfuerzo final ganar los Puzatones, o sea el Alto de la Guardia, donde ya solo nos queda repetir el camino jacobita hacia la villa de Tineo, lo cual hacemos a toda pastilla, enfrentando la ruta en descenso a velocidades de vértigo, y con el freno siempre a punto de afilar las pastillas , pues sabemos que por estos lares patrulla el paisanaje autóctono, jacobitas y algun animal que otro, con esta rienda suelta y oyendo las ruedas gordas de Paredes, Ruben yAlbano tras de mi aprieto las “rotor” para que vean lo que es un viejo ciclobiker bajar al estilo Durango por estos lares.

Concluimos la ruta entrando en Tineo y haciéndonos un foto con el liberal patriarca Campomanes, dando cumplido homenaje a una preciosa ruta por las tierras de Tineo.

• Track de la Ruta
• Fotos de la Ruta

Víctor Guerra