RODANDO POR LAS PEREGRINACIONES (GR.105)

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Punto de Salida y Llegada: OVIEDO

• · Puntos de Paso: Las Cruces-El Caldero-Los Llanos-La Grandota-Los Veneros-Santo Medero- El Rual- Mieres- Moreo de Limanes- Cerdeño-Abuli
• · Longitud de la Ruta: 37 Km
• · Horario de la Ruta. 5 horas
• · Desnivel acumulado de ascenso y descenso: 1.15 mts
• · Participantes: Sandra Alvarez, Toño Cuervo, Javier Riestra, Luis Roza, Angel Luis Truébano, José Ramón Natal, Iván Menéndez, Javier Paredes, Victor Guerra.

TRACK DE LA RUTA EN WIKILOC:https://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=21537903

Oviedo, tiene más territorios para la bicicleta de montaña que el Naranco y alrededores, y por tanto esta nueva cita en las tierras en los predios de Ovetus, personalmente quería que se alejase de los recorridos al uso, y ahora que empieza a difundirse de nuevo el recorrido del GR-105 de las Peregrinaciones, que mejor que lanzar un recorrido de ida y vuelta teniendo como referente este emblemático cordal por el que circula la llamada ruta de las Peregrinaciones a Covadonga, aunque casi todo el personal va por la carretera adelante.

Aunque el día previsto era el mejor, pues ya los pronósticos climatológicos nos avisaban de que habría agua durante casi toda la ruta, pero tal avisó no nos estorbó para conjuntar un interesante grupo que estuvo presto a la ruta una vez convocado en el barrio de San Lázaro, desde cuyo enclave cogimos la carretera AS-242 de Las Cruces, por la cual fuimos en lenta ascensión sobrepasando tanto el famoso cementerio ovetense, como la ermita de Covadonga ubicada en la vertiente de bajada y que marca el inicio del GR-105 de Las Peregrinaciones.

Un poco más allá en El Caldero, el GR-105 entra a la izquierda por un carretil asfaltado que pronto nos muestra cómo será el desarrollo de la ruta, zonas planas alternando con fuertes repechos, de muy distinta longitud y pendiente, y es aquí en este giro donde el personal se reunió para afrontar ya la ruta que dejaba el rumbo Sur, para virar al Este que será la dirección que mande hasta empezar en las inmediaciones el cierre del bucle, virando al Norte para después encarar la ruta hacia el Oeste hasta concluir de nuevo en Oviedo.

Ya tomado el desvío subimos por el repecho a Los Llanos, desde cuyo emplazamiento ya tenemos una estampa que se repetirá a lo largo del recorrido, una bonita vista sobre Oviedo, con el impresionante edificio del UCA en primer término y el Naranco de fondo y los horizontes gijoneses perdidos en la bruma.

La primera subida nos deja ante la carretera que va a la Llovera, aunque nuestro recorrido persiste en el rumbo Este, hasta ganar la base la picoreta de La Grandota, a la que subimos desde las casas de La Ventuca, en ese punto nuestra ruta deja el tramo asfaltado y vira para coger el camino de tierra de la izquierda, que va en mantenido ascenso, ante cuya estructura remolonea el personal metiendo finalmente todo el desarrollo, al final todos vamos entrando en vereda por el camino arriba el cual nos va poniendo a todos en fila de a uno, pues la pendiente y los firmes son los causantes de que a veces tengamos que echar pie a tierra.

Con esa subida vamos rodeando La Grandota por la vertiente norte, cuya imagen con las antenas será una permanente referencia, tanto a la ida como a la vuelta.

De la Grandota con la lluvia acariciando nuestras ropas salimos por Los Veneros parea cruzar el Picu Cuervu, aunque la nubosidad es tan baja que no nos permite ver los valles laterales, tanto la planicie de Siero a la izquierda, como los territorios de Tudela Veguín y Riaño a la derecha.

El camino por él que rodamos se va desarrollando a lo largo de la cumbral, por la derecha nos llega el ramal del GR-105.1 procedente de Mieres, nosotros en nuestro ciclar seguimos enhebrando tramos asfaltados alternados con otros de hormigón y firmes de tierra, aunque estos son de menos entidad y cuantidad, pues en general esta parte de la cumbral se haya muy urbanizada.

Dejamos atrás el desvío de La Paranza que baja por la izquierda hacia el núcleo de La Collá, empezando una larga subida que culmina en Santo Medero, ya metidos en plena Sierra de la Paranza, seguimos pegándonos con el agua y la coronación de la subida hace que tengamos que a veces empujar las bicis dados los barrizales, y así vamos forzando tramos hasta el collado de Santo Medero, que reconoceremos por su mesa y bancos, aunque la cosa no está para sentarse a descansar tras el esfuerzo.

Desde aquí seguimos rodando por asfalto por Santo Medero, Fontañán y Bovia, pequeños núcleos o caseríos aislados que jalonan la cumbral de la sierra, y por la cual con este día no transita ni dios, salvo las cuadrillas de cazadores y algún que otro solitario ganadero.

Se sigue rodando hasta tener que doblar a la izquierda, dejando el ramal que baja a L´Azorera, para tomar un camino de zahorras sueltas, por cuyo trazado se corona la zona del pico Cadaval con sus 513 mts de altt.

De nuevo los trazados de hormigón nos llevan al caserío de Los Umeros, un poco más allá nuestra ruta vira de rumbo, pues es hora de ir cerrando el bucle para ir encarando el regreso a Oviedo.

Y lo hacemos antes de llegar a Molleo, girando a la izquierda, yendo ladera abajo por la Berizosa hasta la Casa de les Chanes, la lluvia arrecia y nos vamos en este punto por la izquierda por la Grijera para pasar por debajo el viaducto de las AS-17, y será en las casas de los Molinos de Rual, donde nos cobijamos unos minutos para degustar las delicatessen de Toño Cuervo, el brownie de quinoa, echando de menos el Prieto Picudo en bota de Roza, y la petaca de Albano que se ha quedado en la cama, tras una noche de farra, todo eso lo hacemos encima de una carro de vacas matriculado en El Entrego en 1955.

Desde aquí, empieza un itinerario inédito, aunque ya nos advierte Toño Cuervo, que estos son territorios por los que ha estado surcando las rutas de la Colloto Bike Race. Para mí es una primera noticia, pues nunca he rodado alguna de sus ediciones, por lo cual es toda una casualidad coincidir en los recorridos, luego ya en casa, y ante el ordenador veo que hay coincidencias en algunos puntos. No dejo de tener buena opinión de la zona para posibles rutas para este invierno, teniendo Colloto como punto de partida.

Concluida la pitanza, de nuevo a las trotonas para seguir hacia el desvío del caserío del Rual, para desde él subir por un camino que va paralelo a la riega de Somberón y empatar de este moco con el acceso rodado que baja de La Collá, donde se dobla hacia el Norte para pasar por delante del Molino de Abundio hacia Santa Marina, será en este punto donde demos vuelta hacia El Campu, por caminos y trazados un tanto laberínticos que nos permiten ir dirección Oeste, camino de Oviedo, aunque en muchas ocasiones sin saber muy bien donde estamos.

Esta es una ruta para hacer con gps, pues los giros son constantes, y si bien en la zona de la cordal de La Grandota y Sierra La Paranza se cuenta con la ayuda de la señalización, aunque deficiente de la Ruta de las Peregrinaciones, en esta otra parte del recorrido no hay nada que nos ayude, o sea que hay que fiarse del gps y de la intuición, pues los desvíos, cruces son constantes.

En El Campu, se gira al Sur, como si de nuevo quisiéramos ir hacia el Picu La Collá, pero se dobla a la derecha para entrar en un camino que cruza la riega de Fuensanta que nos permite llegar al núcleo de casa de El Rebollín, donde de nuevo recobrar la dirección Sur, para alcanzar un camino travesero que va hacia el Canto del Carbayín, y de esta manera ganar la trifurcación de las Regueras en las cercanías de la localidad de Mieres.

Este será nuestro más próximo destino para poder ir virando al Oeste por El Vallín quedando a los pies de la cerrada cantera entre Vallín y Moreo de Limanes, donde quedamos con cara de tontos, pues los caminos han desaparecido, por cuyo motivo, cruzamos la barrera y subimos por el carretil que cruza la cantera arriba, para de este modo poder coger un ramal asfaltado que nos lleva a Moreo de Limanes.

Desde aquí enfilamos hacia el diseminado casco urbano de Roces para enfilar hacia Cerdeño, cruzando la A-66 y por Abuli, pasando por delante del palacio de Labra, donde veraneaba el gran Rafael Maria de Labra; y de esa manera ganar la zona de Fonazendi y por Otero volver al parquing de San Lázaro, dando por concluido este singular bucle, que tiene como dos partes bien diferenciadas, un primer tramo lineal que va dirección Este y marcado como GR-105; y luego el regreso desde Molleo, que se realiza por un laberinto de carreteras, carretiles y caminos que van variando el rumbo de forma constante hasta llegar de nuevo a Oviedo

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Fotos de José Ramón Natal (Foto de Portada), Iván Menéndez y Victor Guerra
 y VIdeo de Ivan Menéndez de la Ruta: https://vimeo.com/247468340

Victor Guerra

JINETES DE LA RECONQUISTA 2016, ruteando a la vez que se reflexiona…

 

INTRODUCION

Generalmente no me suelo meter en estos berenjenales de la seudo competición, pues uno reconoce que pertenece a la generación bike de los tiempos de maria castaña, donde las churras salían con las churras y las merinas con las merinas, y estos mix de mezclar la seudo competición de luchar contra el crono en plan Desafío personal,  con algunos espécimen ajenos al mundo de la competición,  que vamos de palmeros betetiistas,   pues  todo este conjunto de ideas, son las que mueven hoy  un evento, como este del Desafío, que me coge mayor y con otra vena muy distinta a lo que hago habitualmente cada semana

Aun así pasé por el aro, y me presenté en la meta del Desafío Ciudad de Oviedo  Jinetes de la Reconquista 2016, avecindado mediante  «invitación» al grupo DESAFIO POWER, lo cual suponía de mano unos 20 km y 900 mts de desnivel de ascenso acumulado, luego la realidad fue otra, ya que finalmente supuso un esfuerzo de unos  30,2 km y los 900 mts de desnivel acumulado eso sí   con esta ironía «Es un recorrido con un nivel de exigencia físico de iniciación muy asequible para todos los principiantes» .pero la empatía de Aladino Herraiz, merecía una cierta cortesía.

Pero valió la pena pues es bueno conocer por fuera y por dentro la organización de los distintos eventos bikers que se dan en Asturias, y es bueno tener datos para los desarrollos sociológicos del  ciclismo de montaña desde una visión personal, y más ahora que todo el mundo se dedica a poner en la redes consejitos y recetas cuasi mágicas para la practica mountain bikera, pero se huye como gato escaldado de los análisis personales de las realidades que al menos un vive en las propias piernas

Los viejos amigos y conocidos

PROLOGO

La verdad, es que la primera en la frente, uno de buena primeras creía  que iba a encontrarme en este grupo de unos 106 participantes de la Power con apasionados de la BTT queriendo aprovechar un evento, y rodar sin más pretensiones por dicho trazado, pero la realidad es muy tozuda y lo que finalmente impera no es cómo, sino cuanto, ya que el crono manda y mucho,  y casi todo el mundo estaba más dedicado a contabilizar tiempos, que deleitarse subiendo o bajando, o buscando las emociones en estas actividades, o hacer grupos con los cuales deleitarse contando cuitas y los entornos, pero eso no es posible porque lo  que manda es el crono, se haga la mitad a pie o la mitad en bici,  y esa es la motivación del desafío  que queda  para la prestancia personal es el tiempo. Esa es una realidad,  y la pregunta más socorrida que rodaba de boca en boca, era «¿en cuanto lo hiciste»

Antaño entre los beteteros se preguntaba si tal repecho o tal bajada se había hecho encima de la bici, y se comentaban las sensaciones, los miedos, las pericias técnicas en dichos tramos, sobre todo por aquellos que nada teníamos que ganar entrando antes o después en la meta. Por cierto ignoro mi tiempo y el puesto.. aunque alguien quiso halagarme el ego comentando que era el quinto de los Veteranos, menos mal.. acostumbrado a que Torga o Lafuente siempre ganasen en Veteranos me alegra saber que con un poco de esfuerzo podría ganar algunos podios, paseándome por las carreras astures, pues ahora la edad es todo un hándicap  y no es que la categoría de  Veteranos de 60 este muy reñida, salvo que desembarque D. Pedro Cuervo. y compañía..

Digamos que durante la ruta había poco tiempo para las fotos, escasas las  cámaras y hasta escasos teléfonos –cámara, y salvo los reporteros de la prueba que por allí pulularon en la ruta solo vi a Juan Piñera,  y yo mismo con mi cámara una Canon EOS 550 D  y  un 35-105 de objetivo, eso fue todo lo que se debió ver por la ruta.

REALIDADES Y PERVERSIONES

Realmente la evolución del Mountain bike ha ido olvidando la practica ciclomontañera, y los tramos que el territorio nos ha impuesto son recorridos menos  más rodadores, y con  otro tipo de exigencias técnicas, ahora ya no hay  zonas de «non stop» como se le ponían a Paco Sala o a los Coronas de primera hornada, donde poner en pie en tierra en diversos tramos penalizaba.

Hoy estamos en otra órbita donde manda la potencia y vencer el desnivel y el crono  que es el gran tótem de todas las pruebas, los cuales crecen en la misma medida que desaparecen los tramos más técnicos, que si los hay enseguida pasan a denominarse  «tramos endureros,» echo de menos los senderos «float» de 5 km por la sierra madrileña en tiempos de Nájera, Sala, Caravias, Guillermo de Portugal, en las competiciones de Majadahonda, y demás.

Viendo y pedaleando en Desafío de Ovetus, entiendo mejor lo que sucede por ejemplo en  Los Marineros, donde una clásica convocatoria ciclomontañera, alejada de este tipo de seudocompeticiones, pero sufre  parte del embate de  la mentalidad reinante,  pues al haber un crono que se introdujo por otras historias,  lo que se ha establecido es un cierta mentalidad  seudocompetitiva que encajan mal en las actividades ciclomontañeras de cicloturismo, destruyendo en parte los conceptos clásicos, que guardan Los Marineros, La travesía BTT de Degaña y la Travesía de la Cordillera de Asturcón, cada una desde su idiosincrasia 

Dando un salto a la competición de Mountain Bike asturiana, está claro que el ciclismo de competición ha subido  en asistencia,no mucho…, pero está en alza,  pero sino fuera por esos mix de presencias, tipo Desafíos, Bikes Race . Powerades, como en el caso de Oviedo que reunió en si tres Desafíos  (Ultra Power (20km y 900 mts desnivel  , Basic ( 50 km y 1800 mts)y Ultra Elite 70 km y 2.300 mts  ) la cantidad de corredores y de asistentes a las carreras sería cuando menos, cuasi ridículas y casi que no pagaría el tiro organizar nada, lo cual está en el candelero, como vienen demostrando las reuniones entre organizadores y federación, pero ya se sabe que la prospectiva en la Federación es una signatura fallida.

Los Beteteros de BTT ASTURIAS

Por tanto bajo el manto del mix de los Desafíos, y otras concepciones se esconde todo una gama de realidades, como que se de la paradoja de que haya casi 600 participantes y muy pocas licencias, y se de con cierta frecuencia la bicoca de licencias federativas  para un día a 18 E,

Está claro que hay un importante núcleo de participantes que  sale con licencia de tránsito; cuya realidad dura lo que dura, pues una vez comprobado el crono, habría que ver el grado de fidelidad a las pruebas, aunque  se puede aventurar  que también va bajando, pues el nuevo  personal del pedal busca nuevos horizontes. y se puede ver con respecto a la presencia de corredores astures, por ejemplo  en la Bike Race de León, y la falta de presencia en otras pruebas regionales

Por tanto lesa  perversión, generalizada,  en el caso que nos compete, Desafíos Oviedo 2016 es que por ejemplo todos estamos metidos en el mismo sarao y a la misma hora, por tanto,  como ha sucedido en este Desafío Ultra Power, cuando uno estaba disfrutando de los escasos metros de senderos, pues por atrás te pedían paso, pues había que se estaban batiendo el cobre ya con la carrera muy lanzada, unos lo pedían por favor y otros lo exigían….Unos abríamos hueco y otros pues pues a lo suyo.. Tal vez cada grupo debería salir con unos minutos de diferencia, para que no hubiera esas cuestiones, o  deslindar los recorridos.

No son estas, perversiones propias de una u otra prueba, o concentración, ( aunque es curiosa la evolución etimológica en la denominación de las pruebas y concentraciones) es algo que se ha ido generando en el ambiente biker, muy falto de referentes y referencias, solo esta la competición en un extraño mix competición –cicloturismo, y lo demás es una amplia región desértica en la cual pequeños grupos como BTT Asturias, Ciclando Asturias, etc , que cada semana sin medios y sin apoyo alguno,  lidiamos por mantener ese espíritu del «Sin Prisas», de la importancia de conocer el paisaje y el paisanaje a lomo de las BTT, y sufriendo los embates de esas perversiones que crea el sistema.

EL DESAFIO POWER 2016

Avituallamiento

De buenas a primeras decir que Jinetes de la Reconquista, ha caído de pie en la vetusta ciudad de Oviedo, son tal para cual, uno necesita del otro, y la prueba a ha situado a Oviedo y a su cresterio sureño de Grandota y Escobín en el mapa, lo cual no quiere decir que no haya trabajo, esfuerzo y diseño y mucha mano izquierda y empatía, y reflexión y cariño en hacer de este encuentro todo un referente biker..

Dicho esto nos montamos en la trotona para salir por debajo del arco de meta, junto con otros  115 participantes tanto Don Iván Menéndez, como yo mismo, lo cual hicimos partiendo de la plaza catedralicia a toda pastilla tras un disloque con el dorsal, lo cual nos hizo subir pulsaciones e ir a buscar al personal de cola  ya abandonando la trama urbana que escoltados por la policía local, estos nos despidieron fraternalmente bajo el Enlace de Otero para enfrentar un recorrido en el cual puedo decir que ha primado el hormigón y los tramos de asfalto, con salpicaduras de caminos y algún que otro sendero. En general la tónica dominante era  la ascensión  por encima de todo.

La lucha por el crono y la falta de pericia técnica de algunos puso  en las primeras rampas a muchas unidades con el pie a tierra, dejando a las claras lo poco que se sabe de estas cosas, pues se caminaba con la trotona de la mano por la mejor trazada, ajenos a la realidad de los que hacían de la ascensión del tramo su meta, en fin una penitencia que se repitió bastante durante toda la ruta al menos hasta llegar al avituallamiento.

BTT Rozon de Degaña

A los 45 minutos de recorrido el primer tramo de camino que ya se hacía esperar, pues tras superar las rampas de Vidayán , Los Molinos  y Pando, bordeamos su monte  junto con el Vidayan por traza caminera hasta dar con el GR 105 de Las Peregrinaciones, y donde se vira al Este hacia La Barraca y alcanzar la cumbre común a todos los desafíos  La Grandota  con  509 mts.

La ruta esta bien señalizada, y no sufre de superávit señalético, digamos que tampoco es que Oviedo se haya mojado mucho en señalizar su territorio, por tanto la supremacía señaletica de Jinetes en la zona es casi total, lo cual supone un buen control del trazado, pero eso no quita de que Jinetes haya caído de pie, pues en otros lares(carreras)  por menos el personal  montaba en cólera, y aquí puedo decir que controles que  había más bien pocos, escasos  para mi gusto, aunque el papel que se firma de de descargo responsabilidad, ya se  «indica que la ruta es abierta, que se circula con vehículos no vinculados con la prueba, que hay cruces, giros, y demás sin control alguno, que hay tramos peligrosos que hay presencia de senderistas, que hay descenso muy peligroso que no reúnen las condiciones suficientes de seguridad».

En fin un texto así, en un trazado como este lleno de carreteritas que unen pueblos y aldeas, donde se circula sin track, nada más que siguiendo las placas y flechas pintadas en el suelo son todo lo que se necesita para seguir Jinetes 2016.

Ganada la cumbre de la Grandota, se bordea por el Este, para salir rumbo Sur hacia Navea de Abajo, entrando en un bonito sendero que se hace corto, y donde los que competían no pedían paso, dada la estrechez y así como pudimos fuimos descendiendo  hacia Tudela de Veguín  y al pie de de la Ermita de la Merced en Reculaño con 13,5 el primer y único avituallamiento, al menos  para los 117 participante de la Ultra Power, ,y también para los 219 competidores de la Basic, e ignoro cuántos serían para los 182 corredores  de la Ultra Elite

Un reencuentro con viejos amigos  del Club Ronzón, y con el amigo Ivan y ya tras un descanso seguimos por nuestra trazada que fue plana por la Senda de Tudela- Olloniego, camino de Sotos del Rey donde se llega en pis .pas disfrutando de la compañía de  Miguel Angel   de BTT Rozón que se vino con los de la Ultra Power aunque quedó clasificado con el mejor 4º puesto de la Básica.

A partir de que se concluye la Senda de Olloniego empieza toda una ascensión por Lusiella hacia la Venta del Aire, cerca del Pico Lanza para enhebrar el limite municipal  y por la vieja traza del Camino de Santiago  por la Ventasy el Caxigal seguir rodando hacia los Prietos y la Manjoya, tramo pequeños de camino con grandes tramos de camino hormigonados y asfaltados, y buenos  repechos.Entrando en el Parque de Invierno, tras unas 3 horas y 34 minutos de tiempo total que dice mi GPS y en cuyo transcurso estuve parado 53 minutos. tras realizar la Ultra Power con una propina de 10 km más de ruta, será por los zizg-zag para subir los repechos.

Una cosa curiosa, y que denota en parte lo que vengo exponiendo es que la entrada en grupo en Meta es algo esporádico, lo normal es hacerlo en solitario o como mucho en parejas. A partir de ahí que cada uno saque sus conclusiones

En fin una experiencia más, y el reconocimiento a los Herraiz, y al Club Deportivo Aldex, que saben como manejar un tema tan complejo como este, de conjuntar  todo un evento, partiendo desde la multiplicidad y teniendo como  frente común el crono,  y si quieren más emociones pues ya sabes para el próximo año más y mejor y más DESAFIOS y a buen seguro que Aladino Herraiz sabrá como hacer que esa fecha del mes de junio sea interesante para  tu vida y experiencia biker, tenlo por seguro.

Y para ver las fotos que realicé ese día:

https://www.facebook.com/events/1260580350642108/1260988487267961/?notif_t=plan_mall_activity&notif_id=1465813149973159

TRACK DE LA RUTA ULTRA POWER

Victor Guerra

Por Oviedo a lomos de «Jinetes de la Reconquista»

Foto de Antonio Lana

• · Punto de Partida y Llegada: Oviedo
• · Puntos de paso: La Bolgachina-Los Vendones-Folgueras-Limanes-La Grandota- Tudela Veguín- Bendones- El Cruce.
• · Kilómetros de la ruta: 27 km
• · Horario de la ruta: 4 horas
• · Desnivel de ascenso acumulado: 1.186 mts
• · Desnivel de descenso acumulado: 1.194 mts
• · Participantes: Leopoldo Figueras, Albano Capezzali, Roberto Alvarez, Luis López, Rubén Alvarez, Andrés Herraiz, David (Tribu Astur) Javier Paredes, Lluis Fernández, Antonio Lana y algunos más…
• · IBP Index: 133 y IBP fit 89

El año pasado no pude asistir a la famosa ruta de los Jinetes de la Reconquista, pese a las facilidades de sus organizadores para que pudiera participar bien para cubrir las rutas para el blog o para rodar la ruta.

Pero como he dicho, no fue posible porque el CiclaMadrid requirió mi presencia en los parajes madrileños, o sea que me quedé con la ganar de tener mis propias sensaciones sobre esta convocatoria que empieza a crearse una mítica a su alrededor, sobre manera ligada a su dureza, que es el valor ahora en alza a la hora de programar actividades de carácter ciclomontañero.

Y ya que no pude asistir, pedí al amigo Iván Menéndez, tan dispuesto como siempre, del por qué no hacía de guía de la ruta en uno de esos sábados que salimos a hacer ruta. Pues la idea en principio era hacer la »ruta corta» de Jinetes de la Reconquista, sin problemas- me dijo-luego como buen leguleyo enseguida fue a liar a Andrés Herraiz, en la movida de ser guía de la ruta que al final tampoco era Jinetes de la Reconquista, sino un cierto mix de ruta que nos daría una cabal idea de lo que es la citada ruta que circula toda ella por territorios ovetenses.

 

Hecha la convocatoria oportuna mediante facebook en BTT Asturias, nos juntamos un buen grupo en el Parque de Invierno, y tras el café y la charla, salió el grupo comandado por Andrés Herraiz que nos sacó de Oviedo rumbo Norte primero por la Manjoya para doblar en Los Barredos hacia el Este y ganar el Cementerio de Oviedo por su trasera Sur camino de la AS-242, para de este modo no tener tanto repecho de salida, aunque esta se realidad sale de la Plaza la Catedral.

Una vez en la carretera de la Manzaneda, se gira a la derecha para rodar por ella unos metros y desviarnos un poco antes de El Cruce, por un ramal a la izquierda, que es por donde circula la ruta GR 105- de las Peregrinaciones, tramo que pronto nos presenta su cariz técnico en pendiente y firmes peliagudos, o sea que salvo muy pocos, los demás pie a tierra y ganar la collada que forma con el camino la picorota de La Barraca.

Se entronca un poco más adelante con el asfalto, carretera que va de Bendones a Foro, se cruza este eje para seguir de frente también por asfalto unos metros, el cual cambiamos por firmes de tierra que bordean el promontorio de la Grandota por su cara Norte, y continuando por camino hasta virar en Los Veneros hacia los núcleos de El Conceyín y Las Folgueras. El camino es bonito y poco a poco vamos bajando hasta ganar de nuevo un carril asfaltado que nos lleva hacia esos núcleos de la parroquia de Limanes, rumbo Norte.

En Conceyín recuperamos el rumbo Oeste para ir a media ladera, cruzando la riega de La Bargosa o Agrail, camino de la quintana de Las Regueras, donde la ruta empieza a virar hacia el Sur, pasando por debajo de Tisierra y ya en ascenso continuado hacia el límite municipal y ganar la Cruz de los Campos, retornando de nuevo a la ruta de Las Peregrinaciones que habíamos dejando en Los Veneros.

Todo este tramo es un continuo tobogán de subidas y leves bajadas, metidos en plena mata boscosa, que salvo por la zona cumbral que nos ofrece buenas vistas, el resto es concentrarse en el pedaleo, pues vistas para el entretenimiento hay pocas.

Ganada la cuerda concejil, se gira la derecha para tomar rumbo Oeste, pasando por Los Campos, y recorriendo el GR 105 que abandonamos para zigzaguear por entre carretiles y caminos y colocarnos debajo de La Grandota, 509 mts altt, pero a ahora nos cobijamos en su ladera Sur, para seguir por un rato este rumbo camino de Naves, entrelazando bellos caminos y sendero, lo mejor de toda la zona , con algún que otro pasaje técnico hasta casi llegar en el descenso a tocar ya en el valle la población de Tudela Veguín, a la cual le damos la espalda en la zona de la Llana, y colocándonos dirección Oeste por encima de la AS-243 que se cruza por debajo de Cortina.

Un poco más adelante en un giro, nos detenemos para despedir a algunos compañeros que retornan a Oviedo, y en ese medio tiempo nos cruzan los de Ciclando Asturias, en un momento nos juntamos un rebañin de bikers, aunque con direcciones y destinos distintos.

En ese punto de encuentro nos vamos dirección Norte subiendo por un amplio y plano camino, muy diseñado que sube a la par de la riega de Bendones, a la vez que admiramos la traza del amplio camino y nos interrogamos sobre su posible origen dada su buena estructura, y el cual nos deja ante otro carretil asfaltado por el cual subimos hasta desembocar en la iglesia de Bendones, impresionante lugar y atalaya, y dado lo bueno del día nos solazamos al par de la eremitorio mientras damos un bocado y nos contamos nuestras cuitas.

De Bendones salimos por su acceso rodado para coger más arriba la carretera regional AS-243, y girando sobre ella a la izquierda terminamos por desembocar en El Cruce y ya tomando la AS-242 bajamos como una exhalación hacia el punto de partida pero ya de forma directa , pues el momento amenaza lluvia, por lo tanto nos da tiempo a lavar las bicis y proseguir hasta el final de la ruta dando por concluido este bucle sobre los trazados «largo y corto» de los Jinetes de la Reconquista, que tiene merecida la fama por su dureza, y eso que nos rodamos la zona del Escobín, que es de «cágate lorito»

Una buena jornada en muy buena compañía.

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Víctor Guerra