- · Punto de Salida y Llegada: Belmonte de Miranda.
- · Puntos de Paso: Cezana- Braña Extremea-Collado del Muro- Collado Moro- Collado Las Bobias-Modreiros.
- · Longitud de la Ruta: 28 km.
- · Horario de la Ruta. 3 horas.
- · Desnivel acumulado de ascenso: 1.146 mts.
- · Desnivel acumulado de descenso: 1.140 mts.
- · Participantes; Javier Paredes, Javier Riestra, Ferchi, Iván Menéndez – Julián Fernandez y Victor Guerra
Uno propone y la climatología dispone. No hay otra.
Desde la semana pasada teníamos previsto una ruta que consistía en dar la Vuelta a Peña Manteca, una cumbre mítica entre los «Vaqueiros de Alzada» pues en sus trasiegos ganaderos esta amplia cordal siempre les ha servido de referencia, y para nosotros tiene el atractivo, de que ya que nos podemos hollar su cumbre, pues al menos rodearla, lo cual supone toda una aventura ciclomontañera.
Pero nuestro gozo en un pozo, pues las recientes nevadas nos obligaron a retirarnos de tal empresa a medio camino de su realización, y como alternativa plantearnos acometer otra ruta más corta y facilona, que por cierto hizo las delicias de los riders asistentes a la ruta.
Tras el matutino café en Belmonte, partimos en dirección a la ruta que teníamos planteada como primera propuesta: Vuelta a Peña Manteca, con la idea de que si la cosa no iba bien por alguna circunstancia como el tiempo, dureza o climatología, si podíamos alcanzar el Collado Moro, podríamos contemplar una posible alternativa o vía de escape.
El problema fue que en vez de irnos por la larga carretera de Alvariza hacia Carricedo, pues nos metimos por la Cezana, urgidos por el frío que atenazaba todo el valle belmotino que a estas primeras horas de la mañana rayaba los 0 grados.
Eso sí el carretil de acceso a Cezana, enseguida nos puso en fila de a uno e hizo que a medida que cogíamos altitud la ropa de abrigo fue desapareciendo, pues al calor de las pedaladas por la pendiente se unió la aparición de tímidos rayos solares durante la subida hasta llegar al pueblo de Cezana. O sea unos 4,5 km., de subida en los que hay que ganar sus buenos 420 mts., de desnivel.
Durante la subida me di cuenta del error cometido, pues desde alguna curva se podía ver al otro lado el valle de Alvariza y las revueltas que da la carretera para subir al Collado del Muro, hubo tentación de irnos ladera abajo a buscar el carretil, pero ya puestos mejor seguir hacia Cezana.
En Cezana descubrimos la señalización del GR 109 Asturias Interior, pero la verdad es que no sabíamos muy bien por donde discurre su trazado, pues la habíamos visto en el centro de Belmonte, pero luego desapareció de nuestro horizonte hasta volver a encontrarla en el pueblo en forma de doble flecha, una indicando hacia Belmonte y otra que nos indicaba la dirección a seguir que es Boinás.
Este GR. 109 Asturias Interior, digamos que sube más directamente desde Belmonte hacia Cezana, por las Grandas, o sea pendiente arriba y no siempre sus trazados, por más que se indiquen en algunos paneles de información como aptos para BTT, lo son, y lo digo como evaluador de tal red de sendas.
En el pueblo vemos la señal , pero nada más, o sea que seguimos el camino que marca el track. puesto que nada más arrancar ya perdimos de nuevo el GR. 109, lamentando que tal infraestructura fuera incapaz de sacarnos del núcleo, por lo cual seguimos a nuestro aire y tras la huella que nos indicaba el GPS, o sea por un camino amplio, pero muy embarrado y de firmes resbalosos, que nos puso tras un buen trecho ya convertido en medio senda que circula por pardos en el filo de la Sierra de Arcello,
Los trazados digamos que son eso, más bien sendas llenas de agua y barro, por las cuales era casi imposible ciclar pues estaban impracticables, y por tanto cubrir casi 2 km de ruta, nos llevó su buena minutada, no en vano tuvimos que ir lidiando con cierres, barrizales varios. Menos mal que Fritz se había quedado en casa, sino ya tendríamos cantar……
Una vez ganado tras le ardua pelea el amplio collado al pie de Pico Medio y a una cota de 843 mts de altura,que nos pareció larguísima, decidimos que era mejor buscar una alternativa, pues la ruta prevista de dar la vuelta a Peña Manteca, no solo tenía el hándicap de su longitud, sino que la nieve también estaba muy cerca, y ahora los días son muy cortos, y la ruta presentaba sus peculiaridades, y era posible que terminásemos muy de noche la ruta.
En la majada de Pico Medio, con su fuente pilón de agua fresca encontramos un camino mejor y seguimos la traza de la naciente pista que viene de la Braña Estopiello, por lo cual abandonamos el rumbo Sur que traíamos desde Belmonte, para virar al Oeste hacia el Dornón, en cuyo punto donde un amable ganadero, nos indicó que hacia la Collada Abedul aún restaba mucho camino y mucha brega para proseguir por la Sierra Qunitanal y poder ganar de esta manera el Collado Abedul, con el agravante de que por la nieve caída no pudiésemos pasar a la Sierra de las Palancas, como era nuestra intención.
Oído el tema, se tomó la decisión de aplazar la ruta hasta la primavera y optar por el plan B, o sea ganar el parque eólico de Belmonte y seguir hacia Modreros, y tal como nos indicó el vaqueiro, lo teníamos fácil, tan solo era cuestión de virar en dicho lugar (Dornón) hacia el Noroeste, hacia La Braña Extremera, coronada con unas instalaciones ganaderas, unas naves modernas a las que llegamos al punto y tras las cuales arranca una pista hormigonada que dando vuelta al Pico Corona nos dejó ante el Collado del Muro (742 mts., altt).
En dicho collado nos tropezamos con el ramal que une Boinás con Belmonte y el ramal que va en plano hacia el collado Moro.
Cogimos este último que va rumbo Oeste sin apenas perder altura y que desfila por la ladera del Pico Rozada hasta ganar el pronunciado Collado Moro, desde cuyo punto pudimos ver el fondigón de la mina de oro de Río Narcea, en Boinás. Viendo este desaguisado geomorfológico, con un gran socavón hoy medio tapar, todo para sacar 32 toneladas de oro, entre las minas de Boinás y Carlés, no es de extrañar la resistencia de los vecinos de Salave a dejar que Río Narcea Gold Mines, hiciera lo mismo en sus predios.
Tras la contemplación del fondigón minero, volvemos al Collado, para tomar un empinado camino herboso que toma rumbo Norte hacia el Alto La Cueva, a cuyo término de la ascensión damos un bocado a las delicatesen que llevamos, para proseguir la ruta por el Parque Eólico adelante.
Una vez concluida la pitanza y la contemplación del espectáculo que nos ofrece el concejo de Tineo, donde nos entretuvimos en ubicar La Espina, el propio Tineo o los cumbrales del Puerto del Palo, regresamos a nuestra ascensión por el Parque Eólico que nos llevó en primer lugar al Collado Los Fitos, pasando seguidamente al Collado Cimero y remontar al Alto del Caunedo, pasando por los Picos Prietos hasta ganar la Colladiella, engarzado todo en la Sierra de Begega, muy fácil de recorrer gracias a las cuidadas pista de los eólicos, que por cierto había carteles avisando de que podían caer trozos de hielo de las aspas de los molinos.
En La Colladiella (16 km y 1.025 mts alt) un poco antes de ganar el pico Las Cobertorias , dejamos la pista que nos permitió ciclar por el parque eólico , para tomar un camino que se abre a nuestra izquierda que va más abajo de forma paralela al cordal y que se dirige hacia el marcado collado de Las Bobias, (19,5 km y 865 mts altt) el cual se forma entre el Pico de la Bobia y el Pico Gameo.
El camino hasta el collado, es muy entretenido y sin complicaciones y por el cual se transita de forma cómoda hasta el amplio y herboso collado donde se deja la vertiente del Narcea, aunque seguimos en tierras belmontinas, nuestra ruta dobla hacia la derecha como marca el GPS para tomar la vertiente del Piguñea, y de este modo dejarnos caer hacia la aldea de Modreros, cerrando el bucle sobre el Parque Eólico de Belmonte.
Ante nosotros se abre un viejo camino que se va cerrando de forma paulatina quedando una estrecha senda que va ladera abajo, y que presenta algunos tramos un tanto técnicos, sin mucha dificultad, y donde el grupeto lidia su descenso como mejor saber, pues la mayor parte de los compañeros bikers no son precisamente descendedores técnicos, pero la bajada les mola, pues tiene el punto ideal para entrenarse en la técnica de las bajadas y dar a esta ruta su «punto».
Una vez pasado el trago de la bajada , se llega a la aldea de Modreiros (21,5 km., y 655mts .alt), por lo cual no queda más remedio que seguir por el acceso rodado que nos baja directamente hasta Alvariza ubicado en plena carretera general de Belmonte-Somiedo (AS-227). En suma una bajada de 5 km con un desnivel de descenso de 470 mts.
Todo en Belmonte es de esta naturaleza, pero con un poco de imaginación se pueden sacar buenos recorridos disminuyendo los desniveles si subimos los coches hasta los altos collados.
Ya en Alvariza, no queda otra que virar a la derecha y rodar por la AS-227 para entrar con la sorpresa y encanto de una buena ruta.
Ya en Belmonte, estando en el parquing nos salió a saluda la Sra. Alcaldesa de Belmonte de Miranda: Rosa Rodriguez, por estas rutas que promocionan su bello concejo, por cierto es todo un detalle por su parte, el cual agradecemos pues en 10 años que llevo publicando estas rutas tanto en el blog como en el Diario La Nueva España, suplemento Campeones de los Viernes, apenas si alguien o algún Ayuntamiento ha dado las gracias por tan gratuita promoción. Felicitaciones al Ayuntamiento de Belmonte
Tras ello nos fuimos a por un buen caldo que nos sirven con mucha gentileza en el Gran Hotel Rural Cela.
Un buen recorrido para entretener una buena mañana y con vistas excepcionales. (Foto del Gran Hotel Rural Cela)
- · Track de la Ruta
- · Fotos de la Ruta. Victor Guerra