Mostrando entradas con la etiqueta Aventura. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Aventura. Mostrar todas las entradas

martes, 14 de enero de 2014

La Transpain 1994 1ª Vuelta a España en mountain bike

                                                               IMG_0001_thumb[1]

Os traigo aquí el reportaje que ha hecho esmtb.com sobre la 1ª Vuelta a España en BTT. La Transpain, donde tuve el honor de forma parte de la Dirección Técnica  dentro de un grupo de utópicos aventureros de la BTT y que volvimos al año siguiente a poner en marcha la MOUNTAIN DYC 95. En algún sitio del primer video hasta salgo en reunión de organización y todo  gracias a ESMTB por este recuerdo¡¡¡

Victor Guerra

Fue la primera Vuelta a España. 6 etapas y corredores de primer nivel. Michael Rasmussen fue el mejor. Así se vivía el MTB en 1994
  • Era 1994, el mountain bike crecía con fuerza. Era un deporte nuevo, joven, de aventureros y que se ganaba espacios en la TV nacional.

Con él también crecían los equipos, corredores y las carreras. Ese año se lanzaba la primera Vuelta a España den mountain bike. Toda una pionera con un formato similar al de las ahora numerosas carreras por etapas. 6 jornadas para recorrer una parte de la península, con bikers de primer nivel encabezando el cartel de participantes.

En total 140 corredores que representaban a 10 países. La competición arrancaba con una prueba contrarreloj individual en Jerez de la Frontera. Jose Comesaña fue el primer líder tras los tres explosivos kilómetros que habrían la carrera.

Los 82km de la segunda etapa iba a aclarar las cosas en la general. Un rapidísima jornada con una media cercana a los 30km/h para los primeros clasificados. El danés Michael Rasmussen (ahora conocido por todos) se impuso en la etapa y se llevo el liderato.

La tercera etapa se dividía en dos sectores. Un cronoescalada en el primero, con triunfo para José Márquez. Y un segundo sector que era un DH. En la suma de los dos sectores, el vencedor del día sería Javier Notario.

66km eran el trazado del 4º día, entre Granada y Córdoba. Un recorrido muy rápido que volvió a prestarse a media altisimas. El inglés Allan Gunner era el más rápido. Rasmussen seguía de líder, mientras que en junior ganaba un jovencísimo Juan Pedro Trujillo.

La penúltima jornada, con 49km, ofrecía un trazado más exigente. Tomas Ortega se imponía en uno de los días más duros.


La carrera se cerraba con 66km entre Puerto Llano y Ciudad Real. Manuel Vaquero ganaba al sprint, pero Michael Rasmussen, el más regular de la Transpain de 1994, se llevaba la general.

Un trabajo de esmtb.com .

martes, 19 de noviembre de 2013

TRAVESIA INTEGRAL DE LA CORDILLERA CANTABRIA (2ª Etapa)

Pim0001

Entradilla: Los ciclistas de montaña asturianos, tras aparecer en nuestras vidas las “trotonas de ruedas gordas”, algunos como los presentes nos echamos pronto a los caminos y sendas que conocíamos y que nos entusiasmaban, sobre manera aquellas largas travesías, ¿Pero como hacerlo con una orografía tan compleja, como complicada como la nuestra?
Así se fue fraguando la travesía de la Cordillera Cantábrica en BTT, que se convirtió en una aventura y en una realidad, que hasta hoy no se volvió a realizar.


Mapa 2º Etapa
Mapa de la 1ª y 2ª Etapa

SEGUNDA ETAPA de la TRAVESIA de la CORDILLERA CANTABRICA
  • DATOS TECNICOS:
  • Itinerario: Puerto de Cerredo- Puerto de Leitariegos- Orallo
  • Kilómetros: 30.200
  • Desnivel: 1.000

TIERRA MINERA y QUEMADA

Si la orografía de la Cordillera Cantábrica es compleja, no menos lo es el territorio interior asturiano, donde los plegamientos han creado un complicado crucigrama de valles y montañas. Su belleza en la “encainada” es espectacular, pero si uno debe recorrerlo en BTT, acaba con la sensación del minotauro en el laberinto.

La siguiente etapa que parte del mismo Puerto de Cerredo, (1.359 mts altt) abandona por unos momentos la quebrada línea de la Cordillera, y se interna por tierras más proclives a ser rodadas en BTT en una ondulante trayectoria que nos encamina al final de la segunda etapa: Orallo.

Como ya se esperaba, la ruta comienza con un pequeño calentamiento de piernas por las antiguas pistas mineras que nos enfilan dirección NE, para abandonar a la altura de la Cordal de los Collados, el límite provincial asturiano y adentrarnos en tierras leonesas.
El paisaje con las antiguas instalaciones mineras que han dejado como huella cientos de pistas y bocaminas hoy abandonadas, por aquí y por allá, restos de vagones y tinglados mineros, en los que nos entrenemos a fotografiar, unido a la devastación del fuego que en fechas anteriores había acontecido, presentaba a nuestros ojos de aguerridos ciclistas un espectáculo dantesco.

Maraña de senderos y caminos que se entrecortaban los cuales el grupo acometía con la intención de cruzar la Cordillera Cantábrica en BTT, todo este enmarañado mundo de caminos nos iban adentrando camino de la Vega del Palo, buscando en el ascenso el rumor cantarín del Arroyo Fletina, y desde el cual atacar en suave ascenso el Collado de las Llamas de Bocín.

La devastación del fuego se dejaba sentir en nuestras piernas, pues los negros esqueletos de la genista y los brezos, roídos por el fuego se clavaban a nuestro paso por los senderos. Estos dejaban paso a las veredas, fruto de la carcomida labor de la vegetación que cada día iban devorando las amplias pistas mineras, que presentaban ante nosotros, al bordear el Alto del Modorrio, todo un espectacular laberinto de pistas y viejos caminos que en ocasiones no llevaban a ningún lugar. Nos sentíamos como el minotauro que en vez de patas tenía ruedas de tacos.

Los mapas del SGE 1.50.000, no eran bastante elocuentes ante aquella barahúnda de pistas comidas por los piornales y la genista, solo el conocimiento del Jefe Guía del grupo (Javier Gómez) y la ilusión de un grupo que acaba de emprender la aventura eran el sustento y la ilusión para proseguir por entre aquella tortura, que el dios Osiris se encargaba de recrudecer, pues era Agosto, y rodar por estas asoladas tierras en pleno mañana en esas condiciones, era una empresa de titanes.

Llegados a la altura del Collado de la Bobia, de nuevo se giró hacia el SW (suroeste) para acompañar en su descenso a la Riega de Cabada, el extraño firme y los obstáculos, chamuscados, palos de brezo y escobas que se metían entre los radios de las ruedas y en la transmisión, hacían que se maldijese más de una vez la opción a emprendida, más al Sur no había opciones.

Pequeños remontes y descensos, cuyo desnivel se iba acumulando, dejaban en ocasiones a nuestras doloridas piernas llenas de rayonazos y sol amén, que iban tomando ya color y forma pues el desnivel aunque pequeño se iba acumulando.

Abandonado el valle de La Cabada, de nuevos en tierras leonesas, la sucesión de pistas y caminos que se abren hacia el Norte, nos llevan en un pis-pas hasta el Km. 74 de la Nacional 631, que sería cruzarla y seguir camino de El Pando, pero la tentación de refrescarse es más fuerte que nada, y el grupo en pleno y con plato pequeño y paellera metida, acomete la subida hacia el Puerto de Leitariegos, para después doblar hacia la laguna de Arbás.

A pesar de ser Agosto, el agua está fresquita, tal vez la altura y la imponente figura de los 2000 mts. de altitud de del Pico Arbás, no permiten que estas lagunas glaciares se caldeen, y por tanto sean poco invitadoras al baño, conclusión que sacamos al observar que pese a la ingente muchedumbre que rodea la laguna, nadie opta por el baño, salvo los chalados de las ruedas gordas, que pronto dejan ver su tricolor uniforme claro oscuro sobre la piel.

La tarea emprendida pronto reclama al pequeño rebaño de ciclistas la brega diaria, que se echa con alegría y con el piñonaje a tope, puerto abajo hasta el cruce del Km. 74. Un giro a la izda. y de nuevo en plena marabunta de pistas y caminos, que en alguna ocasión nos obligan a echar o bien pie a tierra, o la trotona al hombro, cuestión que empieza a ser como bastante habitual.

El mapa no marca grandes desniveles, pero las lomas se van sucediendo poco a poco, y cada vez que echamos un vistazo al mapa vemos que apenas si nos hemos movido, es más, entre el punto de salida y el de llegada en línea recta apenas si hay más de ocho km. Sin embargo la ruta nos va a demandar el esfuerzo de rodar durante unos 32 km, con un desnivel acumulado rayano en los 1000 mts de altitud, eso pese a los pocos desniveles fuertes que acometemos.

El paisaje nos es tan bonito como esperábamos pues la barbarie de las quemas no ayuda a su disfrute, aunque en parte éstas han quedado atrás, al menos las más intensivas, a la altura del arroyo de Valdepita, aún vemos que a la vegetación le cuesta tomar altura.

Al rebasar las brañas que levantan a mitad del curso alto del Valdepita, el paisaje se hace más bonito y denso, lo que nos permite no caernos de las trotonas, la genista y los brezos son tan densos que apenas si nos podemos ver unos a otros, aunque por otro lado nos viene bien tanta vegetación para no caernos en nuestras bravuconadas trialeras, pues ella nos sostiene.

Dicen que los pinchazos en las trotonas (BTT) son de los más frecuente, en este caso es una excepción pues salvo una astilla de brezo que taladró una cubierta, reparación de emergencia: esparadrapo cartón, nos sacaron del apuro, y no hubo que contar más incidentes en la etapa.

La bajada hacia las amplias vegas que riega el río Orallo, ya en pleno valle de Laciana, toda una virguería que gozamos a bloque, las agostadas praderías nos dejan rodar a gusto y sin miedo a clavarnos alguno de aquellas astillas de brezales y piornales.

El pequeño embalse a las puertas del pueblo de Orallo, donde el personal autóctono se reconcilia con el fresco, después de un día intenso de calor, coopera a que en esta ocasión montemos el campamento volante en este fresco lugar.

El problema de estos lares que podían constituir un buen lugar para clicletear a gusto, tiene el problemas no solo logístico, sino también de supervivencia, pues hay que desplazarse hasta Villablino para dar a nuestros fatigados “bodys”, la energía necesaria, Viilablino nos depara una sorpresa para la cena opípara que pedimos: Arroz en cantidad aderezado con media docena de chipirones, y todo vino al revés, los peces a tutiplén y el arroz en cazuelitas. Por mucho que explicamos que lo que queríamos era el nutriente básico para nuestras fatigadas piernas, arroz los parroquianos y la hospedera nos miraban con ese gesto típico de pensar estos “asturianos se han vuelto locos”.

Y no estaban mal encaminados, pues la travesía de la Cordillera, cuando la contábamos o decíamos de donde veníamos sonaba a estar mal de la chaveta y ser una aventura de auténticos locos.

Víctor Guerra 

lunes, 11 de noviembre de 2013

TRAVESIA INTEGRAL DE LA CORDILLERA CANTABRICA (1ª Etapa)

Hace ya un porrón de años y al calor del desarrollo del Mountain Bike en Asturias, una serie de bikers liderados pro Javier Gómez (Torreblanca) no echamos al monte a recorrer en 9 días la Cordillera Cantábrica. Hoy vuelvo a traer el recuerdo de esta aventura de hace 22 años, y ahora que el Club que funde hace 25 años ASTURCON BTT, está de aniversario, bueno será recordar algunas de aquellas gestas.

DATOS ESTADISTICOS de esta AVENTURA BIKER

Participantes
  • Club Asturcón BTT: Manuel Fernández y Víctor Guerra.
  • Grupo Montaña Torreblanca: Héctor y Valentín Arranz, Vidal Sáez José Cabal y Javier Gómez.
Fechas de Realización: 17 al 25 de agosto 1991
ETAPAS:
  • 1ª Campa Tormaleo - Puerto de Cerredo. 46 km. Desnivel: 1.300 mts [1].
  • 2ª Puerto de Cerredo – Orallo. 30.200 km.; Desnivel: 1.000 mts.
  • 3ª Orallo – Puerto de Somiedo. 23 km.. Desnivel: 1.000 mts.
  • 4ª Puerto de Somiedo-Santo Emiliano. 45 km. Desnivel: 1.200 mts.
  • 5ª Santo Emiliano- Busdongo. 35 km Desnivel 1.250 mts
  • 6ª Busdongo-Puebla de Lillo. 52 km. Desnivel 2.150 mts.
  • 7ª Puebla de Lillo -Oseja de Sajambre. 45 km. Desnivel 1.350 mts.
  • 8ª Oseja de Sajambre- Portilla La Reina. 45 km. Desnivel: 1.270 mts
  • 9ª Portilla de la Reina – La Vega de la Liébana 30 km. Desnivel. 1.300 mts.
  • TOTAL de la TRAVESIA: 351 km.
  • TOTAL de KM rodados por Asfalto: 52 km
  • CICLABILIDAD D ELA TRAVESIA: entre el 80%-y 86%
CUMBRES ASCENDIDAS: El Negrón, Tres Provincias; y Peña Prieta.

Pinci1

De izquierda a Derecha: Víctor Guerra; Manuel Fernández; Vidal Sáez; Valentín Herranz; Javier Gómez, José Cabal y Héctor Arranz.



[1] Desnivel en Ascenso y acumulado.


LA AVENTURA DE LA CORDILLERA CANTABRICA EN BTT
Entradilla: Los ciclistas de montaña asturianos, tras aparecer en nuestras vidas las “trotonas de ruedas gordas”, nos echamos pronto a los caminos y sendas que conocíamos y que nos entusiasmaban, sobre manera aquellas largas travesías, ¿Pero como hacerlo con una orografía tan compleja, como complicada como la nuestra?

Así se fue fraguando la travesía de la Cordillera Cantábrica en BTT, que se convirtió en una aventura y en una realidad, que hasta hoy no se volvió a realizar.

COMIENZA LA AVENTURA. 1ª Etapa: Los Músicos de las Trotonas

En agosto de l991, un cúmulo de circunstancias me une a un proyecto muy adelantado que comandaba Javier Gómez, del grupo de Montaña Torreblanca, y tras de sí estaba un grupo compuesto por: Héctor; Valentín Arranz, Vidal Sáez y José Cabal, miembros del mismo grupo montañero, por parte de Asturcón BTT, estábamos Manuel Fernández y el que suscribe..

El objetivo de este peculiar grupo era cruzar toda la Cordillera Cantábrica de Oeste a Este, entre el 17 al 25 de agosto. Nueve días para afrontar todo un desafío: cruzar toda la columna vertebral de la Cordillera, unas veces por su vertiente Sur, y otras por la Norte, pero nunca dejarnos tentar por el apetecible asfalto, o por las mullidas pistas de los valles bajeros, lo cual suponía cubrir 350 km de caminos, más unos 60 km de asfalto.

Así emprendimos viaje, agolpados en una furgoneta Ford, camino de la Campa de Tormaleo. En estos viajes es cuando uno de da cuenta de lo mal que se ha vertebrado Asturias, pues su vieja infraestructura nos hacía dar mil vueltas para llegar a tan apartado lugar tras malgastar unas cuantas horas.

La Campa de Tormaleo, (1.100 mts. altt) es una amplia camperona al pie de Puerto del mismo nombre, en la cual en aquellos momentos había un templete de música, bien pensaron los pocos lugareños que hasta allí habían llegado aquel mediodía unos extraños músicos. La realidad para todos fue más cruda, pese a nuestra moderna indumentaria, no éramos precisamente los que allí íbamos a tocar el instrumento sino a ciclar por aquellos despoblados parajes.

De estas trazas empezó la ruta hacia el Puerto de Cienfuegos, con un componente menos encargado, pues sería el encargado de llevar el vehículo hasta Cerredo, mientras el resto empezaba a pedalear bajo el calor de Osiris que apretaba más de la cuenta, mientras nosotros apretábamos el pernil y el piñonaje para ganar metros a la amplia pista a base de zig-zag. En la zona de la Varallaga, la huella que dejábamos dando quiebros, era de los más que elocuente, para comprobar lo que nos costaba coronar el Puerto.

Llegar a lo más cimero del Puerto de Cinfuegos (1.693 mts altt) fue como abrir una ventana, pues desde ella, y ante nosotros se abría una larguísima cadena montañosa que debíamos engullir a base de dar pedales. La bajada hacia el valle de Guimará fue una delicia, pues el firme de estratos pizarrosos hacían que las trotonas volasen.

Para ser fieles al proyecto dejamos a medio bajada la amplia pista y enfilamos hacia los viejos senderos y caminos aledaños a ésta, los cuales se abren bajo la sombra de la Peña Chica, vetustos caminos trazados medio abandonados que nos llevaron sorteando algún otro obstáculo, a base cabriolas trialeras, hasta Guimará y Chano, donde tuvimos que rodar por un tramo de carretera hasta Peranzanes.

Este es un apartado pueblecito, a 937 (mts de altitud), donde los lugareños nos indicaban y calificaban de todo, pues nuestro proyecto era y fue, acometer la ascensión del Puerto de la Collada o del Trayecto. Las opiniones del paisanaje eran de todo tipo y color, incluyendo el de locura, tal vez contemplar nuestras monturas y nuestros “bodys”, y convencidos unos y auto-convencidos otros, de que no había otro remedio nos lanzamos a la conquista del Trayecto, tras unas breves explicaciones.

De la alegría que nos iba deparando el amplio camino que nos daba acceso al puerto, pasamos a la más desconsolada tristeza, al ver que teníamos que echar sobre nuestros hombros las “trotonas” y tomar con paciencia el asalto a tan inconmensurable masa boscosa. Hoy me dicen que hay una pista, Menos mal, pues de lo contrario es una aventura que puede desesperar a uno, pues no en vano nos peleamos con la vegetación y las trotonas durante más de una hora para poder concluir al ascenso y coronar la masa boscosa del Trayecto (1.615 mts. altt)

Tras pelar, aún unos buenos minutos con el ramaje en lo más alto de la cumbre, dimos con un viejo camino que nos llevó por la Parada Seca, acompañando a la riega Regueirón, en una bajada llena de adrenalina, que tuvo su final en el pueblo de Las Bárcenas, o sea que habíamos dado un buen rodeo para llegar al mismo sitio que habíamos pasado por la mañana.

La tarde se nos echaba encima y prácticamente no había más alternativa para que volver a pisar un tramo de asfalto hasta Degaña donde visitamos al médico, pues en plena bajada se me introdujo una mosca en la oreja y tenía molestias infernales. Una vez limpio el conducto auditivo, seguimos en dirección a Cerredo.

Atrás habíamos dejado unos buenos desniveles y una buen pelea con el matorral del que eran testigos nuestras doloridas piernas, pues no en vano habíamos recorrido 46 km. en unas 6 a 7 horas y con un desnivel de subida que sobrepasaba los 1.300 mts.¡Del desnivel de bajada para que hablar.¡

Víctor Guerra

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...