- · Punto de Partida y Llegada: Cangas de Onís
- · Puntos de Paso: Corao-Abamia-Aleos- Teleña-Sirviella- Benia-Tresanu – Tarano- Labra- Jabariega-Llueves
- · Kilómetros de la Ruta: 45
- · Horario de la Ruta: 5 horas
- · Desnivel de Ascenso Acumulado: 144 5mts
- · Desnivel de Descenso Acumulado: 1390 mts
- · IBPE INDEX: 127AA
Cangas de Onís a nuestros pies. Foto de Bike Asturias
La idea que teníamos era subir por Demués a los Lagos de Covadonga, pero el día amaneció de aquella manera, medio queriendo llover, y con el cielo muy encapotado. Lo que ya nos hizo ver a lontananza que los Lagos estarían llenos de niebla, y como la subida es larga y costosa, pues decidimos que lo mejor era buscarse una alternativa, y ya que mis compañeros de ruta: Albano Capezzali, Antonio Lana, y Nacho, no conocían la zona pues que mejor que rodar por el llamado valle del Río Güeña, el cual nos aporta no solo un intenso paisaje sobre las norteñas sierras de Ibeo y Cuera, sino que al rodar por la otra orilla nos ofrece el gran panel de los Picos de Europa.
Y así lo hicimos, partimos de Cangas de Onís, camino de la Senda de Covadonga, que hasta hace poco no era más que un viejo camino, hoy es una senda asfaltada, que para nosotros aunque nos deja calentar, no dejar de haber perdido parte del encanto que tenía.
Acompañamos al río Gueña por unos instantes, hasta llegar a la altura de Soto de Cangas, donde seguimos de frente, ya que la senda toma hacia dentro del pueblo, rumbo Sur, camino del Real Sitio de Covadonga, nuestra ruta sigue rumbo Este hacia el pueblo de Corao, pero en esta ocasión por medio de una senda de tierra también al lado del rio Güeña.
Ya en Corao, tierra de adopción de Roberto Frassinelli, cruzamos la carretera y nos metemos por entre el poblamiento buscando la vieja carbayera de Coaro, que da cobijo a la gran fiesta ganadera de la zona una vez al año. En este punto tomamos el trazado del GR 105.2 que va hacia la Cruz de Priena, y que primeramente sube hacia la Iglesia de Abamia, a la que llegamos por medio de una pista hormigonada que presenta los primeros repechos de la ruta. Visitada la Iglesia sonde estuvo enterrado Don Pelayo nos vamos camino del Cuetu de Abamia, que cruzamos hasta la ultima casa, bajo la cual a la derecha, camino al principio bastante bueno , pero que luego va presentando pero aspecto, lo que nos hace perfilar más la técnica de poder rodar por lodazales y caminos bastanteados por el ganado vacuno.
Poco a poco, y a veces llevando la "trotona de la mano" llegamos al núcleo de Aleos, mientras contemplábamos el paisaje, un perro me enfrió los discos de freno, y flipó cuando vió salir vapor…; en Aleos, ya arranca una pista hormigonada que va hacia Teleña en franca dirección Este, bastante por encima del rio Güeña.
Una vez en Teleña se vira dirección Norte por la carretera CO-5 para bajar por el segundo ramal que hay a la derecha y que nos lleva a Intrialgo, antes contemplamos los escenarios de lo que debiera haber sido nuestra ruta, La Cruz de Priena, los contornos de Tarañodios, la mejorada vía que sube por el viejo trazado del Camín de la Reina hasta Llagarmundi… y allá más lo lejos Cantón de Soñin…
Y a la izquierda o sea casi de frente las sierras del Ibeo, y más la fondo el Cuera. Visto lo encapotado del día bajamos hacia Intrialgo donde tomamos el Camino del Navariego, que encuentro asfaltado, lo que le quita a la ruta cierta singularidad. En Con tomaos la carretera que va hacia los Gamonedos, y a la altura de Llano de Con , en la zona de la Ermita de San Roque abandonamos la carretera para tomar el camino que sube hasta el Camino del Carbón, por Monte Oscuru, la subida se hace con tramos técnicos y otros medio ciclables, y en ese trasunto nos salta al pie de la rueda un corzo camino de territorios menos frecuentados…. Entroncamos el Camino del Carbón, con sus musgos, y corzos parea encarar una bajada rumbo Norte hacia la carretera AS-114 que une Corao y Cabrales.
Cuando llegamos a esa carretera en las cercanías del Puente Pelamoru, se cruza la carretera para tomar la carretera de acceso a Sirviella y Villar, enlazando rápidamente con la capital del Concejo, por el que ahora rodamos que es Onís, y cuya capitalidad ostenta Benia. Unas cervezas y una "pinta de vino con casera" en vasu de sidra, en el Teyeru, para no perder la costumbre, a la vez que saludaba a una vieja amiga somedana que salía del Spa de Maria Manuela, tras el descanso nos ponemos de nuevo en marcha, pero ahora cerrando el bucle; o sea que volvemos a Sirviella para tomar en esta ocasión el GR 109 que nos va a permitir rodar por la otra orilla del Güeña, dirección Oeste.
Hace ya tanto tiempo que no rodaba por estos lares, que no recordaba que los viejos camino que suben en francos y duros repechos a las aldeas de San Martín y Beceña, por Treseros, Huerto del Rey, son prácticamente ya todos ellos carretiles asfaltados, algún viejo tramos que queda, saliendo del GR 109.. pero poco queda de aquella vieja red caminera técnica y dura como ella sola. Que se lo digan aquellos viejos compañeros que corrieron la fase de selección del la 1ª Vuelta a España en BTT Transpain 2004. Tal vez se acuerde de ella el amigo Taboada.
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Subimos a Tárano…siguiendo la señalización del GR 109 con alguna que otra deficiencia y falta de atención a las reposiciones, y de este modo se entronca aún con una traza en franco deterioro que nos baja hacia la riega Chico, a partir de cruzarla tenemos un camino pindio , y algo técnico, que nos vuelve a presentar una repecho por firmes de tierra para subir a Labra.
En este punto Nacho nos abandona pues tenía el compromiso de irse a la ruta de Lin de Cubel y no era plan de forzar mucho más. EL resto de la expedición nos vamos por el nucleo de Labra arriba camino de la Jabariega, y dejando a los expedicionarios con la boca abierta con las esculturas del Palacio de Labra….como diría algún castizo " menudo pastón se gasta el pavo del palacio en bronce".
Ganada La zona de la Jabariega con bellas estampas sobre el Güeña, nos dejamos caer hasta La Pasada, donde se entronca con la carretera de Tresanu, subimos pues por la derecha hasta ganar el Collado Laín, donde abandonamos la carretera para subir hacia el Monte de Onao, que corona el Pico El Arbolín.
Ahora si que los firmes ya serán todo tierra, vamos ganando poco a poco los distintos collados como la Onao, Cardés u Oliciu, dando vista a nuestro pies a la extensa villa de Cangas de Onís, como al gran panel de los Picos de Europa que nos hemos podido ver en toda su extensión y plenitud pues la masa de nubarrones nos impide tener las bellas perspectivas que desde aquí se pueden contemplar en días francos de nubes y calimas; bordeamos el Pîco Arbolín por la Pardas ya media ladera y en plano, cuando no en a suave bajada, hasta la Soronda de Arriba, donde se entronca con el carril asfaltado que pasa a Olicio.
En este punto nosotros viramos dirección Sur, para por el pueblo de Llueves bajar ya sin freno y por carretera local hasta el mismo Cangas de Onís, fin de la bella ruta en torno al Río Gueña, para otro día haremos la subida a los Lagos.
Víctor Guerra