- · Punto de Salida y Llegada: LA ESPINA (Salas)
- · Puntos de Paso: La Pereda-Alto de Casa el Puerto-La Llaneza- Cerezal-Alto de Piedratecha- Tineo- El Pedregal.
- · Longitud de la Ruta: 32 Km
- · Horario de la Ruta. 5 horas
- · Desnivel acumulado de ascenso y descenso: 1200 mts
- · Participantes Javier Dolado, Javier Riestra, Fernando Torre, Carlos y Fino de Lavio, Javier Paredes y Víctor Guerra
Volver a las tierras alta de Salas y recorrer desde ellas la Sierra de Tineo, al margen de vanas apuestas tipo Graviti, es siempre una delicia y máxime en estos tiempos tan revueltos, y ya no digo nada si encima nos acompañan los promotores de la Ruta de la Flavius de Lavio, a la que esperamos poder recorrer sus trazados para resarcirnos de no haber podido acudir este año.
Ese fue el marco en que nos movimos hace un par de semana sábado, y en esta ocasión hemos tomado como punto de encuentro el Bar El Cándano en La Espina, que sigue siendo lugar de parada y fonda, antes de echarnos a esos mundos bikerianos, que en esta ocasión desfilarán por las inmediaciones de la bella sierra de Tineo.
Tras la puesta a punto en el Cándano, reavituallando de líquidos y sólidos nos ponemos en marcha dirección Oeste, subiendo hacia La Pereda desde la rotonda al pie del bar subiendo por la llamada Cale de Arriba, que presenta buenas trazas y que nos permite subir sin muchos problemas hacia La Picota.
En un momento dado ya nos sobra ropa, porque el dia esta como tristón, pero no hace mala temperatura ni llueve.
Al salir de la Pereda e ir hacia La Picota, ya estamos definiendo el trazado que se desarrollará por la margen norteña de la Sierra de Tineo, que a estas alturas su comienzo lo marca el promontorio de los Altos de la Pereda, a cuya cumbral se sube tras unos cuantos cientos de metros de rodadura y el inevitable porteo por los predios del Monte Casa Cristo, para alcanzar de esta guisa la collada de la Degollada, con apenas 3,7 km.
Ahora se va en plano sobre el valle por cuyo fondo desfila el río de Brañalonga, no tardando mucho, pues vamos disfrutando del dia y el paisaje no hay prisa alguna, se llega a otro significado enclave Alto de la Casa El Puerto, con 6,3 km ya ciclados.
Desde este punto seguimos por la carretera AS.359 que va al Alto de Parafita, pero en nuestro caso nos metemos al punto en el pinar del Monte de Guromayor, por un camino que va en plano y por debajo de la carretera hasta llegar al Chanu y Fuente la Cruz.
Atención a este punto, es importante porque aquí se cambia de rumbo, se viral al Norte, tomando una senda que van por el lateral derecho de la Peñas de Buseabrín, estrecha y casi imperceptible que tras dejar atrás unas abandonadas praderias se pone de nuevo dirección Oeste buscando el viejo camino por la Campachonga y el Campu, donde encontraremos una buena traza caminera, muy vieja eso sí, que nos lleva al pueblo de La Llaneza, donde concluye el asfalto. (10,4 km)
Salimos de La Llaneza por caminos que van hacia el Chanu del Horriu valle abajo, aunque eso tarda poco en cambiar al tener que virar para coger la riega del Caborno, muy arriba e ir hacia el reguero de Penedón, un largo tramo de viejas trazas camineras hoy medio abandonadas que nos van sacando a zonas más abiertas hasta alcanzar el pueblo de Cerezal bastante más grande. (13,4 Km).
Del pueblo, desierto a esas horas, salimos por asfalto y en rampa para dejar de lado su carretil asfaltado e ir al Sur pro una amplia pista que va a cubierto, por debajo de Peña Canteironas y El Chao que muestran sus molinos, paradójicamente quietos, ganamos de esta forma el Alto de Piedratecha, donde nos damos de bruces con las marcas del Camino de Santiago.
Durante la ruta hemos visto señales, por aquí y por allá del programa de Gravity Zone de Tineo, ruta 7 , y la verdad es que no se han matado mucho en el diseño de la ruta, digamos que han ido a lo clásico, sin innovación ni imaginación.
En el Alto, con 17 km rodados, se cierra el bucle sobre la cumbral tinetense, ahora toca recorrer por la margen sureña la sierra en dirección a la capital del concejo, hacia Tineo, por un camino arreglado y señalizado que va por Rumiayor y la Ferita en un descenso tranquilo pasando por encima de Piedralonga, ciñéndonos a la vera de la ladera del pico Navariego y divisando los predios de Tineo, guarecido en el valle sobre el que se descuelgan sus casas. Vamos poco a poco, pues durante el camino por mi parte me he quedado sin freno trasero, y pese a las maniobras de Torre por mejorar la situación la avería se resiste, y detener en los descensos con el freno delantero es todo un peligro.
Pasamos por delante de la cabaña del último mohicano de Filipinas, o sea de Arcadio Rey, el Pana que ha pasado al Oriente Eterno, y cuya morada está dejada de la mano del GADU. Nuestros amigos de Lavio nos van llevando por los vericuetos tinetenses hasta el Campo San Roque, donde se impone un caldo caliente.
Si desde Piedratecha no había problemas, menos los hay desde San Roque, pero serán Carlos y Fino quien nos irán conduciendo en general por el Camino de Santiago cruzando la parroquia de San Eulalia de Tineo, teniendo como referente el polígono industrial de la Curiscada o los molinos de Bodenaya, puesto que vamos dirección Este, cruzando las Tabladas de Rozón y cruzar la aldea de El Pedregal, pasando por delante de pequeños caseríos hasta desembocar de nuevo en La Pereda, y terminar en La Espina, en Cándano tomando sus pinchos boccato di cardinale.
© Victor Guerra