RUTA BTT POR NOREÑA y SIERO

• · Punto de Salida y Llegada: Noreña
• · Puntos de Paso: Ferrera- Anes-Orviz-Pico Mora-Barganiza. Peñaferruz- La Madera- Pico San Martín- Pico el Sol- El Monte-La Riestra- La Barreona
• · Longitud de la Ruta: 48 km
• · Horario de la Ruta. 4 h.
• · Desnivel acumulado de ascenso y descenso: 1.290 mts mts.
• · Participantes: Juan Piñera-Javier Paredes-Luz López-Luis-Roza-Fritz-Javier Riestra

• · Track de la Ruta en WIKILOC:https://es.wikiloc.com/rutas-mountain-bike/norena-pico-el-sol-bosque-muno-norena-23514934

El famoso Condado de Noreña, no es un territorio que pisemos mucho con nuestras trotonas, por tanto, dad la puñetera inestabilidad atmosférica, y dado que parece que hay una ventana de buen sol, que mejor que subir desde Noreña al Picu el Sol, y ver la rasa costera gijonesa en toda su dimensión.

Congregados al par de las instalaciones de Noreña, nos dispusimos a realizar unos de los tracks que los amigos bikers de Noreña, nos deleitan para sus fiestas, este creo que es una ruta del 2008, y que se presenta interesante, aunque en nuestro caso para que fuera aún mas intensa nos planteamos hacerla en sentido contrario a como se planteó.

Se partió de Noreña, para virar después de dejar la estación del FEVE, a la derecha rumbo Este, pasando por la rotonda y cogiendo la carretera de Ferrera, aunque en la Campanica, ya dejamos la dirección de Ferrera para entrar a la izquierda por carretiles locales, y algún que otro tramo de camino que nos llevan a Ferrera de Arriba, ya colocados en dirección Norte.

Una sucesión de carriles os van encaminando, lo cierto es que la ruta presenta un aspecto bastante urbano, hacia el pequeño núcleo de Espinella, un tramo de camino nos saca otro carretil donde se vira a la izquierda, al Oeste hacia la parroquia de Sanmartín de Anes, donde se cerraría el primer cruce del “ 8” que forma la ruta, esta retoma la derrota Norte también por carretera hacia los parajes de Orviz.

Se cruza la carretera AS-246, yendo dirección Noroeste, por subidas no muy fuertes pero continuadas, que nos llevan por solitarios parajes, llenos de pequeñas construcciones de fin de semana, al punto divisamos a lo lejos tanto el recinto penitenciario de Asturias, como las antenas del Bufarán como las Aboño sobre manera dejamos atrás Pañeda Vieja y alcanzamos como quien no quiere la cosa el Pico la Mora, y Cucureza de apenas unos 301 metros de altitud, con unos 10 kilómetros rodados.

La ruta tiene poco donde escoger, pues la red de caminos ha sido devorada por los tramos asfaltados u hormigonados, y eso deja pocas opciones de entrar por caminos de tierra.

Se pasa por delante la las instalaciones de Golf de La Barganiza, que se bordean por la parte superior para seguir al Norte a la Piquera de Atalaya, estando muy cerca de Soto de Llanera y de Pruvia, pero en esas cercanías la ruta que va dirección Norte va virando al Este hacia la aldea de Peñaferruz, a donde se llega con unos 13 kilómetros rodados.

En Peñaferruz el panorama cambio y nuestro horizonte ya se fija en las instalaciones de comunicación que coronan el Pico el Sol, del cual aún estamos bastante alejados, y aún tenemos que circular por extraños parajes, cruzando al municipio de Gijón, circulando por la vera del arroyo Forcón para ganar al el Molino de Prado, ubicado por debajo del núcleo de La Quintana y el cruce de riegas de Forcón y Vega, se cruza el forcón de riegas para entrar a la vera del arroyo Vega , hasta poder ganar la ver de otro importante cauce fluvial como es el río Pinzales.

A esta explanada donde el valle ser abre a nuestra izquierda, por la cual baja el río Pinzales cargado de aguas procedentes de otras riegas, vuestra ruta en este punto con 16 kilómetros rodados vira por unos momentos al Sur para seguir por el carretil que va pegado a la riega, tomando altura para girar en el Yerbanu.

Es un rodar pro una serie de cerrados valles conformados en base a diferentes riegas que vamos siguiendo, como la de San Tirso, donde ya e dejan las vallejas fluviales para ir remontando subida arriba por San Tiso, hacia el entronque con la carretera del Alto de la Madera donde se toma el ramal en ascenso, durante un par de cientos de metros rodamos por ella para desviarnos al cabo de ellos, a la izquierda por el carretil que va trepando por la ladera de la Casas del Alto de la Madera, hacia el llamado Picu San Martín con unos 519 mts, le damos la espalda para ir por la Collada del Monte, para enfilar la ultima subida de este tramo es el Pico El Sol con 439 mts de altt, y con 27 km de rodaje.

El Pico del Sol, nos ofrece a este buen día una impresionante vista sobre la rasa costera gijonesa, y al sur sobre las sierras prelitorales y la Cordillera Cantábrica, a las cuales nos dedicamos unos buenos minutos a tan grandiosas estampas.

Una vez finalizada la contemplación y recompuestas nuestras fuerzas, retomamos la ruta que ahora enfila hacia el Sur, primero dando un pequeño rodeo por el monte de Lavandera, para de nuevo llegar al limite concejil por el Prado de la Cruz para enfilar tras el repecho hacia el Pico Carbonera, que se deja a la izquierda para ir dando vuelta a la valleja de El Monte, entrando por El Xigal, hacia el bosque de Muñó, hasta empatar de nuevo con el asfalto en La Riestra hasta bajar al Prau, donde de nuevo entramos en un trazado de caminos de tierra cruzando el arroyo Cogollo, para subir al cabo de haber ganado el cauce fluvial hasta la aldea de San Andrés.

De nuevo nos emboscamos en trazados de tierra que por Les Texeres hasta alcanzar los caseríos de La Barreona, donde se deja el rumbo Sur, para virar al Este para cruzar por encima la autovía AS-1 y en Serrapicón, de nuevo los caminos por los cuales vamos rodando, no perdiendo de vista las antenas del Picu San Martín, que siguen omnipresentes, hasta volver a encontrarnos en Sanmartín de Anes.

Otra vez en el cruce del bucle en forma de 8 y nos vamos otra vez al Norte hasta la aldea mencionada antes, pasando por delante de la iglesia de Anes y el Molino de la Agüera y cruzando la AS-246 ya se enfila hacia Sur pudiendo entrar en unos minutos de nuevo en Noreña, pasando por el monumento a su gran sostén económico como es el «gochu»

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Fotos de Juan Piñera y Victor Guerra

© Victor Guerra

VUELTA AL PICO POLIO

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Foto de Juan Pîñera en Campa CImera

• · Punto de Salida y Llegada: Figaredo.
• · Puntos de Paso: Turón-Villafría-Puente Villandio-Fozu Fortuna- La Molinera- El Mosquil-La Faya Verde-Campa Cimera-Colladiella- La Mozqueta-Pico Polio- El Rancho- La Viña
• · Longitud de la Ruta: 45 km
• · Horario de la Ruta. 6 h.
• · Desnivel acumulado de ascenso y descenso: 1.150 mts
• · Participantes: Juan Piñera-Luis Roza-Javier Riestra- Victor Guerra
• · Track de Wikiloc:

La climatología manda, y por tanto lo mejor es rodar por entornos conocidos por aquello de no exponer al grupo en situaciones que puede ser potencialmente adversas, y como además hacía ya tiempo que no íbamos a la zona del Caudal, nos fuimos a una zona interesante, la cual puede ser idea para muchos practicantes tanto por las facilidades en su realización com o por las posibles escapatorias y variantes.

Dicho y hecho, de ahí que nos fuéramos a Figaredo, como punto de partida para dar la vuelta al Pico Polio desde el Valle de Turón.

Salir de Figaredo hacia Polio, lo cómodo y bonito, aunque la zona este medio degradada es hacerlo a través de la Senda Verde de Turón, la cual cruza todo el valle hasta ganar la parte alta ya lindante con los territorios del Nalón, luego serán otros caminos y pistas señalizados de diversas maneras como los Anillos Ciclistas de la Montaña Central, u otros los que nos devuelvan a Figaredo.

Salimos pues por la Senda Verde o fluvial, tomando la dirección de Peñule donde conectamos con la Senda Verde de Turón que nos va envolviendo en los recovecos del valle, bien por una orilla de la carretera AS-337, bien por la otra, o cuando no está nos acerca a las orillas del rio Turón, ganando en ese recorrido metros al valle turonés, que nos presenta, a nuestro paso, diversos inputs como el Pozo Figaredo, ya cerrado, así como tantos otros, y pudiendo ver como la mano del hombre ha variado todo un paisaje.

Deslindar. O enunciar los sitios por los que se pasa en esta por Turón, es complicado, pues estamos ante una sucesión de aldeas y casas que se van encadenando metro tras metro hasta alcanzar la zona más poblada que es la Cuadriella, y todo centro urbano que se genera alrededor del Pozo San José que se conoce como Turón, centro reconvertido y de buena presencia, y lugar donde nuestra ruta deja lo fondero del valle para subir por las antiguas escombreras hacia el cementerio de Turón, que sigue presentando lo que fue la zona civil medio abandonada.

Subimos hacia Trescasa en base a una buena repechada para tomar altura sobre el valle, y pudiendo ver las laderas que se derraman de la sierra de Polio hacia lo fondero del valle turonés. Ya situados en un plano alto, pues apenas si perdemos altura en algún punto, pero nada importante, así pasamos por encima de poblaciones como Villafría, pudiendo ver a nuestros pies el pozo Santa Bárbara, o ver el viejo castillete de Pozu Espinos, hecho de madera, y como alto valor añadido contemplar lo que fue el centro neurálgico de la revolución de Octubre del 34: La Rabaldana.

Siempre que paso por estas tierras me llama la atención el que un ayuntamiento tan de izquierdas como el mierense, no haya hecho del 34, una cierta bandería histórica ya que desde la Senda del Valle Turón se pueden pasar y observar todos los escenarios, no se haya hecho todo un desarrollo temático en formato de paneles explicando los escenarios de Octubre del 34, que se estudia en la mitad de las Universidades del mundo, menos en el lugar de los hechos que se guarda a modo de vergüenza, y ya se sabe un pueblo que esconde su pasado…

Seguimos nuestra ruta por lo alto de la Senda que discurre por la vertiente derecha del río Turón, y de cuyo plano bajamos hacia el Puente Villandio, para poder acercarnos al tristemente famoso Pozo Fortuna, al cual fueron arrojados bastantes «rojos». Hoy su entorno ha sido convertido en un pequeño museo de la Memoria Histórica, con diversas instalaciones, una de ellas con variadas frases de escritores y pensadores universalmente reconocidos.

Dejamos atrás el Pozu Fortuna, con unos 10 km rodados, para encaminarnos de nuevo hacia la Senda que sube a la ladera que se deja caer desde la cumbral del Navaliego; Sí hasta aquí la Senda mostraba cierto abandono, que se achaca a la crisis económica, creo que ello también afecta a una cierta crisis de valores, como es la desidia por los entornos, lo cual camino de La Molinera se deja notar con una continua presencia de árboles caídos y argayos sobre la plataforma de la Senda, que pueden considerarse como circunstanciales, pero no también denota la inexistencia en labores de mantenimiento, con cientos de metros de barandilla derruida, por todas partes, etc.

Desde Fortuna pasando por La Molinera y subiendo un poco más arriba hasta las viejas instalaciones de El Mosquil, más que rodar lo que hicimos fue saltar, bordear y alambranos en una sucesión de árboles caídos sobre la Senda, que daban ganas de irnos para atrás y marcharnos para casa.

Impresentable el espectáculo de la Senda de Turón, parece conformar todo ello parte de esa inercia de abandono total, incluso por parte de la ciudadanía que espera la presencia municipal a modo de maná, no me extraña que los Anillos Ciclistas de la Montaña Central de Asturias, se vengan a abajo, los propios grupos ciclistas del Caudal, han pasado de tal infraestructura biker como quien oye llover.

En fín la crisis se ha llevado por delante muchas cosas, incluso la estima por los lugares propios.

Una vez dejado el Mosquil con sus viejas instalaciones mineras, y habiendo desaparecido la gymkana arbórea, la Senda de Turón entra en otra fase, la que conecta el Mosquil a través de las aldeas o barrios de Urbiés: El Cantinquín y la Faya Verde con la parte alta del recorrido, donde la Senda toma otro cariz, pues aquí con 17 km rodados, los perfiles de la ruta muestran los primeros repechos de una larga subida que por los aledaños del Mayau Carril hasta ganar el entronque con la pista que viene de Cabañaquinta. En la subida nos preguntamos por el grupo biker Yeloquehay que nos pasó como un cohete un poco antes de La Molinera.

En la subida nos encontramos con un pequeño grupo senderista con Monchu Rodriguez  y Dani del Aire, camino de Cabañaquinta, me paso cambiamos algunas impresiones, y cada cual sigue su camino…

A partir de aquí ya está todo ganado se dice, lo cual no deja de ser una verdad a medias, pues la ruta una vez se llega al entronque sigue subiendo hasta coronar mucho más arriba, dando vista al Pico Tres Concejos, y por cuya pista nos echamos abajo, cogiendo velocidades de vértigo. Aquí es donde se deja notar la diferencia entre unas trotonas y otras, las dobles, bajan que se las pelan, hasta lo más inexpertos nos dejan atrás, les faltará técnica a algunos de ellos, pero la estabilidad de las dobles les aporta seguridad, pues se lo comen todo, bajan sillines y no se les ves el pelo en la bajada.

En fin, nos desviamos un momento en Campa Cimera (21Km) para poder ver la vertiente del Nalón, con novedosas vistas, o por lo menos perspectivas que no nos son muy frecuentes, ver las sierras colocadas en otro orden de ubicación es una cosa que extraña.

Contemplada la vista nos vamos pista abajo hacia el monumento a los Maquis, el cual resiste las inclemencias y el olvido. Se sigue cumbral abajo hasta el entronque con la carretera que une las dos cuencas: Caudal y Nalón, por el paso de La Colladiella.

Aquí seguimos las señales de los Anillos Ciclistas, y tras cruzar la carretera nos vamos hacia el promontorio que nos separa del otro paso, conocido como la Collada La Mozqueta, a la cual se baja por un tramo urbanizado para entrar en la gran pista que nace al par de la citada collada, en la cual aún se mantiene en pie las señales de los Anillos Ciclistas

Se continua rumbo Oeste, por encima del límite municipal que va por la Cordal de Urbiés, pasando por la Campa Les Abelles hacia la bifurcación, donde un ramal va hacia la aldea de Santo Justo, por donde también va el PR.AS.34, Nosotros seguimos por el ramal que sigue por la derecha en ascenso, ahora al abrigo de la cumbral, aunque el temporal viene del Sur y amenaza con echarse encima de un momento a otro.

Tras la subida, la ruta se va haciendo dura, y los ritmos bajan bastante, también porque el paisaje se deja contemplar dada la luminosidad del dia, se entra en un tramo más plano que desfila por amplias praderas que nos acerca al paraje de La Violar, donde los Anillos se van por la derecha por la Sierra del Rebullu, nosotros seguimos de frente y obviamos la bajada a Carcarosa, para bordear el Pico Polio, por la vertiente norteña, pasando por encima de la naciente sierra de Carraspientes, para de este modo ganar la Collada Les Muries.

En este punto Juan Piñera decide subir a la cumbre del pico Polio, mientras el resto nos quedamos al abrigo tras los matorrales contemplando el gran paisaje que ofrece la zona, con un ángulo de visión casi que a los cuatros costados. Uno podría estar horas y horas viendo y desentrañando las referencias paisajísticas.

De nuevo nos ponemos en camino hacia el Oeste, pasando por encima de todas las antiguas escombreras y lo que fue la explotación minera del Cielo Abierto de Polio, dejando a la derecha la sierra de Tablado, que dejamos atrás para bajar hacia el Área Recreativa de Rozamayor y el Rancho, donde se empalma con el asfalto para seguir bajando por encima de Vegalafonte, hasta llegar al núcleo de La Viña.

Aquí se deja el rumbo Sur cogido más arriba en El Rancho, para virar al Oeste, a la derecha y por firmes de tierra entrar en el “plano minero” que cruza toda esta ladera del monte por los Prados de Alfaiz y Talambera, en cuyo punto el agua hace su aparición, aunque nos deja llegar hasta los viejos cargaderos de la Mina La Clavelina.

Aquí, en la vieja explanada se pude ver el trazado del río Caudal con Mieres del Camino, cuyo horizonte cierra la Sierra de la Peña, y al Sur el valle que entra hacia Lena, ahora cubierto por la cortina de agua que se nos viene encima.

Bajamos por el viejo camino que va hacia Villarejo, y su formidable palacio de los Heredia, que vemos a lo lejos, pues resulta que no vamos a bajar por Villajero como hacemos algunas veces, sino que viramos al Sur, dando la espalda al palacio para seguir por un bello camino-sendero que nos coloca encima de Figaredo, a donde llegamos en un pis-pas, eso sí con el agua lamiendo nuestras ropas.

Fotos de Juan Piñera y Victor Guerra

© Victor Guerra

Ruteando por las tierras del Rey Silo

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• · Punto de Salida y Llegada: El Pito (Cudillero)
• · Lugares de paso: Los Cabos- Santianes-Arroxo- Bances- Agones- Villafría
• · Longitud de la Ruta: 36 km
• · Horario de la Ruta. 4 h.
• · Desnivel acumulado de ascenso y descenso: 1.100mts
• · Participantes: Luis Roza, Fritz, Victor Guerra
• TRACK EN WIKILOC:

Hacia tiempo que no recorríamos la zona pixueta y praviana, y dadas las situaciones tan borrascosas en temas climatológicos hablando, nos fuimos camino de los predios del famoso Rey Silo, casado con el heresiarca Adosinda.

Para disfrutar de tales bellezas quedamos convocados al de lo que fue el pie del altar y del cancel de la basílica de Santianes de Pravia erigida por el rey Silo, hoy sito en la cripta de la iglesia del Pito, y que ocupó durante años el predio de un merendero, a modo de la mejor mesa del lugar, hasta que fue comprada por D. Fortunato Selgas.

Ubicados pues delante de las puertas del Palacio de los Selgas, y teniendo por delante un recorrido que va al Sur por la Sierra de Gamonedo con la intención de darle la vuelta al Pico Santa Catalina de 456 mts de altt., y volver a Cudillero.

Partimos de El Pito hacia el Este por la carretera que nos saca del pueblo y que se abandona por la izquierda para toma el carril asfaltado que cruza la A-8, y ponernos ya en situación de empezar a meter piñonaje, pues tras ese significativo cruce, nace una pista-camino que nos echa ladera arriba pegados a la cubeta- vertiente que forma el arroyo de Aguilar.

Estamos ante una subida tranquila, salvo los primeros metros que son algo más empinados, luego la subida se tranquiliza una vez ganada cierta altura, lo cual nos da interesantes vistas sobre la rasa costera, lo cual invita a sentarse e ir descifrando lugares y enclaves, lo que hacemos durante un corto espacio de tiempo mientras saboreamos un chupito d buen caldo orujano de Liébana.

Se prosigue la trepada en base a algunas revueltas que pronto nos colocan en lo alto de la Sierra de Gamonedo. Ya en la cumbral se pasa al lado del túmulo de la Peñona, (Alto de la Cortina) siempre en dirección Sur, hasta ganar de forma cómoda el Mirador de la Peñona, donde ya la rasa costera se nos muestra en todo su esplendor, y donde dedicamos otros buenos minutos para la observación paisajística.

Tras ello se vira al Este para tomar un sendero en descenso que presenta algunos momentos un tanto delicados, sin más complicaciones técnicas, cruzando en esa bajada la carretera de Somao, para seguir por caminos más anchos cruzando casi que por el medio el promontorio del Curión, yendo a media ladera por la Fayona a tomar la carretera AS-224, por la cual se circula un centenar de metros para entrar a la derecha por una pista que nos permite ir dando la vuelta al promontorio de Monteagudo, hasta encarar la bajada hacia el pueblo de Los Cabos, donde nos topamos en primer lugar con la ermita de Nuestra Señora del Carmen, y luego con las viejas instalaciones educativas del Colegio de los Cabos.

Se cruza el pueblo hacia el barrio de Altura, en donde se deja el carril asfaltado para entrar por un camino a la izquierda, al Este que va virando hacia El Barreo, y luego más en plano gira al Sur para entrar en el asentamiento de Santianes del Rey Silo, lugar donde está enterrado dicho monarca que reinó sobre los predios astures, trasladando la capital de Cangas de Onís a Pravia, se cree que este Silo fuera un rico hacendado galleo ( otros dicen que era un rico hacendado praviano) casado con Adosinda, hija de Alfonso I, y de la que se dice fue preceptor Beatus de Liébana, defensor de la ortodoxia cristiana, y de la cual Adosinda debió renunciar pues se consideraba arriana, por cuyo motivo y la muerte del Silo, terminó en un convento.

Contemplada por el exterior la bella iglesia de Santianes de Pravia, enclave y edificio precioso, se parte dirección Sur por un carril asfaltado que nos lleva a orillas del río Nalón, que va como se dice petado por efecto del deshielo.

Cuando se llega a lo fondero del valle, al poblamiento de Arroxo, se deja el carril para entrar hacia la derecha y tomar una estrecha senda que circula a lo largo de la orilla del Nalón, la idea era entrar hasta Pravia por esta senda fluvial del Nalón, pero parte de la estructura de la senda se la ha llevado el río, por cuyo motivo a la altura de la Ermita de la Magdalena, nos salimos de tal orilla para subir al pueblo de Bances, y habiendo conectado con la AS-224, entrar por ella en la aldea de Agones, sin pasar por Pravia.

Un descaso al resol de la mañana en Agones, siempre es de agradecer, tras ello y no queriendo ir hacia Pravia, decidimos darle un recorte al track que teníamos previsto e improvisar un camino hasta conectar en lo alto de recorrido en Villafría.

Dicho y hecho. Tomamos el carril asfaltado que va a encontrase con el río Aranguín, y continuar por el Camino de los Marineros que se mete ya por firmes de tierra, pegándose a la ladera del Monte de la Veiga y cuyo trazado va subiendo poco a poco por el Monte de la Veiga, hacia la aldea de los Llanos virando en su recorrido paulatinamente al Oeste primero, y luego al Norte.

Se empata con el acceso rodado que nos permite subir a Escoredo, y de aquí sin compasión, ya que desde Agones había sido una subida tranquila, aunque por algún efecto de un palo la gran corona trasera queda doblada, por tanto cuando se llega al asfalto la subida se hace agónica, aunque no es dura pero se hace pesada, tal vez por los kilómetros ya rodados y el desnivel, cuando arribamos a Villafría, ya llevamos en las piernas unos 30 km, recorridos y casi todo el desnivel de la ruta.

En Villafría, se entronca con la carretera AS-352, que se deja en el mismo pueblo para tomar el carril que va a la aldea de San Cristóbal, a cuya altura nos vamos por la derecha al Este, para virar pronto al Norte por el costado occidental de la Sierra de Gamonedo, embutidos en la masa ocalital del monte que nos ampara de los vientos reinantes provenientes de la costa.

Se enfila directamente, y sin remisión en una larga bajada por pista hacia el cruce con al A-8, entrando de nuevo en El Pito por Piñera.

Dando por finalizada tal ruta.

© Victor Guerra

Ruta al dólmen del Padrún. La Carisa (Aller)

• · Punto de Salida y Llegada: Moreda (Aller)
• · Punto de Paso: Labayos Boo-Bustillé-Espines-Alto Cerra-Padrún-Las Cruces
• · Longitud de la Ruta: 22 km
• · Horario de la Ruta. 4 h.
• · Desnivel acumulado de ascenso y descenso: 1.073 mts
• · Participantes: Luis Roza, Javier Paredes, Javier Riestra, Victor Guerra
• Track en Wikiloc:https://es.wikiloc.com/rutas-mountain-bike/ruta-a-los-dolmenes-del-padrun-aller-22977011

Con tanta nieve como hay, y las previsiones de frío, nos apetecía rodar por los restos de la estación nival y que mejor que hacerlo por la cómoda Ruta de la Carisa, sin que ello conllevara riesgo alguno, por tanto, con esta previsión trazamos la idea de una ruta bule que partiendo del valle allerano nos permitiera subir hasta la famosa ruta el General Carisio, para después baja si fuese posible hacia el Valle Negro por alguna de sus famosos descensos, pero como siempre uno proyecta, y luego las condiciones son las que nos dejan o no materializar nuestros deseos.

Partimos el pequeño grupo betetero que esta semana ha quedado como viene ya siendo habitual, ha quedado reducido a cuatro unidades, a los cuales nos reunía la intención de dar una amplia vuelta por los valles alleranos, pues nada hacía presagiar que no se pudiera realizar, dado que las nieves han ido inundando los cauces fluviales, dado el deshielo cuasi otoñal que está presidiendo la nival invernada.

Tras el oportuno café en el café Agóra, sito en la plaza mayor de Moreda, nos pusimos en marcha para subir por carretera hacia la aldea de Labayos, pasando por delante de una muestra de lo que conformó buena parte de nuestro PIB regional como fue la extracción carbonífera y hoy en total declive, pue pasamos por delante del pozo minero San Antonio, explotación auxiliar del pozo Santiago.

Se va subiendo a la vez que vamos catando como las laderas de La Carisa, vertiente allerana, son como dicen «de cojón de mico», en general con buenos firmes de tierra y hormigonados, pero con desniveles en ocasiones más que brutales.

Y eso lo fuimos sintiendo en nuestras piernas pues de Labayos, se sigue en notable subida hacia el pueblo de Boo, pues en apenas tres kilómetros de subida, ya se ganan unos 100 metros de desnivel, aunque esto sería una tontería con lo que nos quedaba.

Una vez en Boó, se deja el rumbo Oeste, para virar en el mismo pueblo al Sur tomando el ramal asfaltado por delante la iglesia dirección que directo a la aldea de Bustillé, atalaya que nos da una impresionante sobre el valle de Moreda sobre todo hacia el Este

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En Bustillé, a la salía de las cuatro casa desaparece como por ensalmo el asfalto, y nos quedamos ante una continuada ascensión que empieza a través de los predios de Solares, para dar la vuelta a las praderías de La Felguera y encaramarnos en la cumbral de la Fontica siguiendo las marcas del PR-266 Megalitos del Padrún.

Dicho asi parece fácil y factible, pero tanto los tramos hormigonados además de ser durísimos se hacen largos, al igual que aquellos otros con firmes de tierra que no le van a la zaga, y vienen uno detrás de otro, no dejando mucho tiempo para el respiro, a pesar del gran desarrollo que llevo tengo que subir alguno a pie, pues mis piernas y el corazón se ponen a cien.

La cosa se suaviza al subir a lo alto de cumbral, y aunque por delante hay unas retorcidas curva-contra curva, las del Fondigón, que también nos presenta unos repechones importantes, estos se van subiendo y nos compensan por estar más altos y las vistas sobre las sierras y valles del Caudal, a cuyos predios debemos volver un día a rodar, son entretenidas además de espectaculares.

Acometemos en grupeta, pues las otras subidas las han hecho Riestra y Roza, y Paredes y yo las hemos hecho como hemos podido, tras la última gran subida, nos quedamos en la bifurcación de Espines, donde aparece la nieve.

Persistimos en la idea de seguir con la ruta, pues, aunque al ver en la vertiente lenense que la nieve ha desaparecido de buena parte de los valles y de los crestones, eso nos anima a proseguir, aunque al llegar cerca del desvío hacia el Dolmen del Padrún, ya observamos que nuestra vertiente allerana, que da al Norte está cargada de nieve, aunque intentamos pasar del Quentu les Cruces hacia el Collado Serralba, no somos capaces de pasar mucho más allá de Carabenés, y ya lo vimos cuan do intentamos ver el dolmen del Padrún, lo cual no fue posible pues estaba enterrado bajo la nieve.

Dada la dificultad de seguir avanzando, y más allá de agotarnos y crear una situación complicada para nosotros mismos damos vuelta a nuestras trotonas para culminar esta ruta de otra manera, o sea cerrando un bucle sobre el valle de Boo, a través de la cumbral de La Carisa.

Comenzamos por tanto la bajada poniendo rumbo Norte, bajando de nuevo hasta el Collado Espines, con su conjunto señalético, pues no en vano estamos en presencia del GR-100.1 Ruta de la Carisa, y enlazando a su vez el PR.AS-76 Vuelta al Pico Ranero, que viene de Pola de Lena. En la bajada magníficas vistas sobre el valle de Lena, y las cumbres del Aramo.

El trazado se pone a cubierto de los vientos bajo la cordal que forman los Picos Cumbre y Ranero, obviando por unos minutos las vertientes lenenses, y por un rápido trazado se alcanza los lugares de La Campa y la Acebal, dando vista de nuevo a Lena, en cuyos predios concejiles se entra hasta dar con la bifurcación bajo el Fontán del Caleyu, dando se entra de nuevo en Aller y se da cara a los parajes alleranos.

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En esta clara bifurcación de deja la Ruta de la Carisa, y se cambia de orientación virando al Este para encarar una rapidísima bajada por el valle, sin apenas hallar nada más que un punto de detención, lo cual hacemos ante una clara bifurcación, por la derecha se baja a Boo, pero nosotros seguimos bajando de frente sin apenas problemas, más allá de la pendiente, hasta alcanzar el fondo del valle, y desembocar ante otro de los inputs mineros aún en pie como es el Pozo San Jorge y el Pozo Santiago, cruzamos el río Aller y la Autovía de circunvalación para colocarnos en la vieja carretera a Caborana.

Se deja esta cruzando la por la pasarela el río y carretera de Circunvalación para entrar de nuevo en Moreda sin problema alguno.

Al final, tras un buen ajetreo nos damos un homenaje en la Sidrería La Fumiosa, a base de huevos y picadillo, y charlando con un simpática camarera también biker como nosotros, aunque más jovencita.

© Victor Guerra